De loa 736 jugadores que participaron en el Mundial de Fútbol Rusia 2018, 82 no nacieron en los países por los que juegan.
Francia, que este martes salió finalista de la Copa del Mundo, representa la diversidad étnica mejor que cualquier otra selección. Tiene tres jugadores que nacieron fuera de sus fronteras, algunos en las antiguas colonias del país, y otros muchos con descendencia de inmigrantes.
Steve Mandanda nació en la República Democrática del Congo. Samuel Umtiti en Camerún. Thomas Lemar nació en la isla caribeña de Baie-Mahault, Guadalupe, que en la actualidad es territorio francés. La FIFA les permite representar a la selección porque hace muchos años viven en el país y tienen la nacionalidad.
Los otros 20 jugadores sí nacieron en Francia, pero muchos tienen ascendencia de otros países, sobre todo, africanos. El padre de este jugador nació en Camerún. Blaise Matuidi es hijo de un angoleño y una francesa. El padre de Corentin Tolisso nació en Togo, y el de Steven N’zonzi en el Congo.
Los padres de Paul Pogba nacieron en Guinea; y los de N’golo Kanté en Mali. Allí nació también el padre de Ousmane Dembélé, quien también tiene madre extranjera: nacida en Senegal.
Los padres de Djibril Sidibé y Benjamin Mendy nacieron en Senegal, y emigraron a Francia, donde tuvieron a sus hijos futbolistas. Alphonse Areola tiene padres filipinos. Presnel Kimpembe es hijo de un congoleño y una haitiana. Los padres de Raphael Varane son de la isla de Martinica.
Adil Rami tiene padres marroquíes. Los padres de Nabil Fekir son argelinos, al igual que la madre de Kylian Mbappé.
Sólo siete jugadores de la selección francesa nacidos en el país tienen, además, padres franceses: Lucas Hernández, Benjamin Pavard, Oliver Giroud, Antoine Griezmann y Florian Thauvin.
Inglaterra, que este miércoles se medirá contra Croacia en la semifinal, también tiene un alto número de hijos de inmigrantes, pero un sólo extranjero jugando.
Raheem Sterling es el único que no nació en suelo británico. Es oriundo de Jamaica e hijo también de jamaiquinos. A los siete años emigró con su madre a Inglaterra y obtuvo la nacionalidad.
En Jamaica también nacieron los padres de los ingleses Kyle Walker, Danny Rose y Ashley Young. Los padres de Fabian Delph y de Ruben Loftus-Cheek nacieron en Guyana. Dele Alli es hijo de una inglesa y un nigeriano, y Harry Kane es hijo de una pareja de irlandeses.
Danny Welbeck tiene doble nacionalidad: inglesa y ghanesa. Él nació en Inglaterra, pero sus padres en Ghana.
Los otros 14 jugadores son nacidos en Inglaterra, y también hijos de ingleses.
Croacia, que debe vencer a Inglaterra para competir contra Francia en la final del Mundial, tiene dos jugadores extranjeros: Ivan Rakitic, que nació en Suiza, y Mateo Kovacic, que nació en Austria.
Sin embargo, como Croacia se independizó hace 27 años y algunos jugadores nacieron en algún territorio yugoslavo, también se podría decir que son «extranjeros».
Danijel Subasic nació en Croacia, aunque es hijo de una pareja de inmigrantes serbios. Los otros 18 jugadores son croatas, al igual que sus padres. (Agencias)
Foto: EFE