PARÍS (Francia).- A solo 34 días de la inauguración de los Juegos Olímpicos de París–2024, uno de sus principales protagonistas: el río Sena, sigue dando la nota discordante como consecuencia de las lluvias.
Vedete de la ceremonia inaugural de la magna fiesta deportiva, el 26 de julio, y sede en sus aguas de varias competiciones, el majestuoso río no deja de causar dificultades por su elevado caudal y nivel de contaminación bacteriana, eso sí, en contra de su voluntad.
Señalar un culpable no es difícil: la inestabilidad climática de las últimas semanas en la Región Parisina, con sus abundantes precipitaciones y tormentas, un escenario que comenzó a cambiar, para bien, esta semana.
La víspera dos malas noticias engrosaron el expediente de problemas de cara a la cita bajo los cinco aros, la primera de ellas la presencia de la indeseada bacteria Escherichia coli en niveles superiores a los permitidos por las federaciones internacionales de triatlón y natación.
Bañarse en el Sena resulta de momento imposible, aunque los organizadores de París-2024 y las autoridades de la Ciudad de la Luz confían en que eso será historia pasada cuando a finales de julio y el cinco de agosto se celebren las pruebas de triatlón, el 8 y el 9 de agosto las aguas abiertas de la natación y a principios de septiembre el paratriatlón.
La más reciente batería de análisis, practicados entre el 10 y el 16 de junio, ratificaron que resulta imposible bañarse en el río cuyas márgenes integran el Patrimonio de la Humanidad.
El clima lluvioso disparó el caudal del Sena, lo cual no favorece la calidad de sus aguas, advirtieron la Alcaldía y la Prefectura de París, enroladas en exámenes semanales para evaluar la situación y el éxito de las medidas en curso.
También ayer se supo que el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos decidió posponer la tercera simulación de la ceremonia inaugural de la cita bajo los cinco aros, prevista inicialmente para el lunes.
El fuerte caudal del río impide el nuevo ejercicio del desfile de las embarcaciones entre los puentes Austerlitz e Iena, el mismo recorrido de seis kilómetros que tendrá lugar el 26 de julio.
Una de las novedades de París-2024 será la inauguración fuera de un estadio, con el desfile de los atletas en barcazas y alrededor de 300 mil espectadores presentes.
El 17 de junio se desarrolló con éxito una prueba en la que participaron 55 embarcación de las casi 90 que intervendrán en la ceremonia dentro de solo 34 días.
Según el prefecto de la Región Parisina, Marc Guillaume, están en marcha varias acciones que comenzarán a brindar sus frutos en cuanto mejore el tiempo, aunque reconoció que ahora mismo la calidad del agua no responde a los requerimientos necesarios.
También la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, mostró confianza en que todo comenzará a cambiar, y reiteró su promesa de bañarse en el Sena, lo cual pudiera ocurrir entre el 15 y el 17 de julio.
El burgomaestre había prometido sumergirse en las aguas del río el 23 de junio, pero se vio obligada a reprogramarlo.
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Fuente y foto Prensa Latina