Agosto es singular por las festividades y celebraciones que se realizan con marcadas diferencias de costumbres y tradiciones en dos importantes ciudades del país, se trata de la fundación española en el mismo día, 15 de agosto, y esto hace que realmente no podamos dividirnos para estar en Huánuco y Arequipa a la vez; pero, podemos seguir las celebraciones y decidir visitar una de las ciudades que tienen su propia personalidad.
Arequipa fue fundada como “La Villa Hermosa de Nuestra Señora de la Asunta” el 15 de agosto de 1540, que luego de un año, el Rey español Carlos V otorga una Cédula Real reconociendo como Ciudad de Arequipa, pero son 484 años de fundación española atribuida a un pelotón de españoles comandados por Garci Manuel de Carbajal que en nombre del Rey Carlos V y del Virrey en Perú, Francisco de Toledo traza la ciudad, establece un cuartel y el terreno para su casa en lo que hoy es la llamada “Mansión del Fundador” en la avenida Paisajista s/n del distrito de Jacobo Hunter en Arequipa.
Desde entonces, se ha convertido en la ciudad más importante del país luego de Lima, con un promedio de trecientos mil turistas visitantes entre la ciudad y el Valle del Colca, impresionante por sus acantilados, nevados y el cañón de 4 160 metros de profundidad y el tránsito del rio Colca. Pero, la ciudad de Arequipa es ya impresionante si empezamos en la misma Plaza de Armas en el que se observa los portales o arcos de portales por toda la plaza en el que se ubica la municipalidad. y al frente la iglesia catedral todos con estilo colonial edificados en piedra volcánica. Luego muy cerca de la plaza, el monasterio de Santa Catalina, que por dentro es una pequeña ciudadela de unos veinte mil metros cuadrados, divididos en cuatro barrios, como si fuera las primeras características del inicio de Arequipa.
Cuesta abajo nos dirigimos al barrio de San Lázaro donde sus calles son muy estrechas y empedradas, con casas de estilo colonial construidas con piedra volcánica que recuerda a los primeros pobladores de la ciudad, Sus calles tienen nombres peculiares por personajes o actividades a los que se dedicaban los vecinos llamados Violín, Ripacha, Bayoneta, Calienes Desaguadero, Cristales, Combate Naval, Camporreal y Tejada. Luego vamos a la Universidad San Agustín de Arequipa que tiene otro encanto académico y juvenil o el mercado de San Camilo, las picanterías y los museos. Todo el centro histórico alrededor de la Plaza de Armas tiene una energía especial que merece recorrer para ir entendiendo cómo fue el desarrollo de la ciudad y las construcciones a base de piedra volcánica o sillar. Así mismo, salir hacia los distritos cercanos es observar las campiñas, chacras, y el majestuoso rio Chili que parte en dos a la ciudad de Arequipa, en todas estas zonas paisajísticas puede disfrutar de comida tradicional y si desea va avanzando hacia Cotahuasi, o al Santuario Nacional de las lagunas de Mejía o a la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca.
Es hora de comer un delicioso adobo arequipeño, o unos chicharrones de Arancota con rocoto relleno y pastel de papas, o mejor un chaque, que es una sopa de carne de res acompañado por verduras, poco diferente del sancochado, otra sopa de chochoca con maíz pelado o tostado, un chupe colorado, un puchero o timpusca, un chupe de camarones de Camaná, una ocopa arequipeña, un solterito, un picante de camarones y disfrutar del queso helado o los panes de Chapi y el pan de tres puntas. En suma, una variedad para disfrutar cada día.
Ya para despedirnos de Arequipa, cantamos un Yaraví arequipeño como las que dedicaba Mariano Melgar, los famosos carnavales arequipeños que es todo un himno en estas fiestas acompañados por los valses de los Dávalos en un “quería verte inolvidable tierra querida.”
Las comparsas de jóvenes salen a las calles por barrios y se encuentran en la Plaza de Armas bailando el carnaval de Arequipa, el montonero arequipeño, la danza de la pampeña arequipeña, otros vestidos con faldones largos, bordados y de colores para la danza del Wititi que fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad.
A su vez, disfrutamos de Huánuco, la “Muy noble y leal ciudad de los Caballeros de León de Huánuco” que fue fundada un año antes de Arequipa, es decir el 15 de agosto de 1539 por el español Gómez de Alvarado, en una zona del valle interandino, camino hacia la ceja de selva destacando las localidades de Ambo, Dos de Mayo y Tomayquichua lugar emblemático donde se dice que nació María Micaela Villegas y Hurtado de Mendoza “La Perricholi”, quien tuvo un romance con el Virrey Manuel de Amat y Juniet.
Huánuco además de tener un clima cálido a templado, nos brinda lugares turísticos como su Plaza de Armas, la catedral, las iglesias de Cristo Rey, de San Francisco y de San Sebastián, construidas hasta 1560 con motivos coloniales, también las iglesias de La Merced, de Santo Domingo y San Pedro; pero que, sin duda, destaca la catedral, llamada también Catedral del Señor de Burgos.
Una de las zonas turísticas más importantes es Tingo María a unos 120 kilómetros al noreste de la ciudad, donde se observa entre las colinas a la Bella Durmiente, el sitio arqueológico de Huanucopampa, las manos cruzadas de Kotosh, en Lauricocha que según estudios son los restos de los primeros pobladores de América, la cueva de las lechuzas, los baños termales de Cónoc y Tauripampa. Además, se observan helechos grandes y orquídeas en el camino hacia La Unión y otros paisajes en Yacus, la tierra colorada de Margos y Yarumayu, la zona arqueológica de Quillarumi, la alguna Viña del Río, el poblado de Sillacoto donde encontrará restos arqueológicos, el cerro de Marapampa y Pillco Mozo, espacios donde debe darse mayor atención para revalorizar y poner al servicio de los Turistas.
Entre la comida típica de la región, se puede saborear el picante de queso con papas y choclo, el locro de gallina, el tacaco con cecina, el picante de cuy, la pachamanca y los prestinos que es un dulce compuesto por yemas de huevo y harina que son fritos y untados con miel.
Pero, mejor es participar de sus fiestas pues destaca los Negritos de Huánuco, danza que se presentan en cualquier época del año, sin embargo, representa la festividad en homenaje al nacimiento del Niño Jesús entre diciembre y enero. Existe un festival durante estos días que es el Jala Jala, que gira en torno a los carnavales huanuqueños, que además de la venta de productos de la zona, también se presentan artistas de talla nacional que alegran el día y la noche de celebración.
Seguiremos viajando por nuestra tierra porque vienen más fiestas, más celebraciones porque Así es mi tierra… Así es mi Perú (MGD).
Fotos Andina