Una mujer de 75 años deberá cumplir una condena de cuatro años de arresto domiciliario en su casa de San Pablo, Brasil, por haber llamado «negros inmundos» y «monos» a tres personas negras.
Los hechos ocurrieron en 2012, cuando la mujer, hoy de 75 años, increpó a una señora y su hija de nueve años en una farmacia de un centro comercial de San Pablo con insultos racistas: «Macaca, no me gustan los negros», «los negros son inmundos», «negros a la favela», «los negros deberían tener prohibido entrar en centros comerciales».
Al darse cuenta del escándalo, los otros dos denunciantes, también negros, se acercaron allí y la anciana los recibió con los mismos insultos y otros más: «Soy superior a ustedes, porque vengo de descendientes de alemanes», informa hoy el diario español El País.
Según el mismo medio, la condena en primera instancia, dictada en noviembre de 2014, era más severa y sentenciaba a la mujer a cuatro años en régimen semiabierto y a pagar una indemnización de cerca de 10.000 euros a cada una de las víctimas. Pero la la defensa recurrió y consiguió reducir la pena.
Como en Brasil más de la mitad de la población es negra o mestiza, el racismo es un delito incluido en el Código Penal y no pouede evadirse con fianza y no tiene prescripción, reporta clarin.com
Imagen: internacional.elpais.com