LAGOS.- Una mezquita de Yola, en el noreste de Nigeria, registró hoy una gran explosión a una hora en que muchos fieles realizaban sus oraciones en el templo, en el segundo atentado contra un lugar de culto islámico en el mismo día, informaron fuentes policiales y de emergencias.
En el atentado contra la mezquita de Jumaat, que se produce solo unas horas después de un ataque contra un templo en Maiduguri, se teme que el número de víctimas sea elevado, según medios locales.
Miembros de la Cruz Roja, la Agencia Nacional de Gestión de Emergencias (NEMA) y otros grupos de seguridad trabajan en el lugar del atentado para evacuar a las víctimas al hospital.
El portavoz de la Policía del Estado de Adamawa, Othman Abubakar, confirmó el ataque, aunque declinó ofrecer un balance provisional de víctimas, indicó el diario «The Premium Times».
El edificio central de la mezquita se derrumbó tras la explosión de una bomba, que habría sido detonada sobre las 13.40 hora local (12.40 GMT) por un terrorista suicida que pretendió unirse a las oraciones.
Yusuf Osama, uno de los fieles que ayudó a los equipos de emergencias, dijo que el autor de los hechos detonó los explosivos a pocos minutos de que comenzaran las oraciones del viernes, de acuerdo con los medios.
«El terrorista suicida intentó acceder al cuerpo central de la mezquita para causar una destrucción masiva, pero la bomba explotó antes de que alcanzara el edificio», precisó Osama.
El ataque contra la mezquita de Yola, capital del estado de Adamawa, se ha producido horas después de que una explosión similar se registrara durante el primer rezo de la mañana en un templo de Maiduguri, capital del vecino Borno.
Ciudades de Adamawa y Borno son objetivos frecuentes del grupo yihadista Boko Haram, al que se atribuye también este último ataque.