AUSTIN (EEUU).- Los estados de Texas y Georgia planean llevar a cabo esta semana a las dos últimas ejecuciones de presos en EEUU del 2015, el año con menos ajusticiamientos desde 1991 en ese país.
Este miércoles, a las 18.00 hora local (00.00 del jueves GMT), Texas prevé administrar una inyección letal a Raphael Holiday, un negro de 36 años condenado por provocar un incendio en el que murieron tres niñas en el 2000.
Según la sentencia, Holiday prendió fuego intencionadamente a la casa de su expareja, Tami Wilkerson, provocando la muerte de su bebé de un año, Justice, y de sus hijastras Jasmine, de 5, y Tierra, de 7.
Holiday tenía una orden de alejamiento de las niñas y Wilkerson, que lo había denunciado por abusar sexualmente de la pequeña Tierra.
Por su parte, Georgia planea ejecutar este jueves, también a las 18.00 hora local (23.00 GMT), a Marcus Johnson por la violación y asesinato de una mujer en 1994.
Johnson, de 50 años, fue condenado por la muerte de Angela Sizemore, una mujer que conoció en un bar y que apareció a la mañana siguiente desangrada en el aparcamiento de un complejo de apartamentos.
Según los testigos, Sizemore estaba en estado de embriaguez y ambos salieron juntos del local.
La de Johnson es la última ejecución programada para este año en el país, ya que la siguiente, la de Oscar Bolin en Florida, no está prevista hasta el 7 de enero del 2016.
En caso de que Holiday y Johnson reciban sus inyecciones letales, EEUU habrá ejecutado este año a 27 presos, ocho menos que en 2014 (35), doce menos que en 2013 (39) y dieciséis menos que en 2012 y 2011 (43).
De hecho, 2015 será el año con menos ejecuciones desde 1991, cuando fueron 14 los presos ajusticiados.