ESPAÑA.- La escritora y traductora María Kodama, viuda de Jorge Luis Borges, presentó en Madrid el ‘Año Borges 2016′, para anunciar los actos que se desarrollarán el próximo año por las tres décadas de la muerte del autor de El Aleph, un tiempo de ausencia que ha sido ‘complicado’, pero que se suaviza con «el cariño de la gente» por su obra.
«Se va a cumplir el trigésimo aniversario de su muerte y siento que todo ha sido duro, sobre todo en los primeros tiempos, con media docena de monstruos acechándome; pero bueno, nunca me involucré, me quedé fuera y el tiempo lo pone todo en su sitio», explica la escritora argentina, de 78 años, que protege y custodia el legado de Jorge Luis Borges.
María Kodama presentó el primer acto de homenaje al gran escritor argentino en el Centro de Arte Moderno, que, juntamente con la Fundación Internacional Jorge Luis Borges, ha organizado los actos programados para el año que viene: una gran exposición en la Casa de América, conferencias, mesas redondas, proyección de películas y otros acontecimientos culturales.
Este miércoles se inauguró una exposición en el museo del Centro de Arte Moderno con el título ‘Metamorfosis. Encuentro con José Pedreira’, y se llevarán a cabo diferentes conferencias en el mismo lugar: ‘Borges y la Cábala’ o ‘Borges en la ciudad de los inmortales’.
También se presentó el libro ‘Al coronel Francisco Borges’, con introducción de María Kodama, que incluye la carta que recibió el abuelo paterno del escritor y que desencadenaría su muerte; y el poema de Jorge Luis Borges ‘Alusión a la muerte del Coronel Francisco Borges’, un libro-caja en una edición artesanal de 100 ejemplares. Además se presentará un número especial de la revista ‘Proa n 22. Atrio de los gentiles’, de la Fundación Internacional Jorge Luis Borges, que preside María Kodama.
Actos que constituyen el pistoletazo de salida de las celebraciones de 2016, que además de Madrid tendrán lugar en Nueva York. Una de las sedes de los actos será el Instituto Cervantes, cuya biblioteca lleva el nombre de Jorge Luis Borges desde hace 25 años.
«No se trata de que haya muchos actos y reediciones, que los habrá, sino de que el nombre de Jorge Luis Borges sobrevuele todo el año, que esté presente su figura», dice Raúl Manrique, del Centro de Arte Moderno.
«A mí me gustaría que se le recordara a través de sus obras, con ese reconocimiento que tuvo en vida, y que la gente me recuerda cuando viajo por el mundo dando conferencias o charlas. Me ayudan a sentir una cosa mágica, me hacen sentir que está vivo, aunque sé que no está», explica María Kodama, quien estudió con Jorge Luis Borges desde los 16 años y con el que se casó poco antes de su muerte.
«La mejor enseñanza que me ha dejado Jorge Luis Borges es disfrutar de la vida, que la vida es maravillosa. Viajábamos mucho, estudiábamos muchos idiomas… Todo era muy divertido, nos lo pasábamos muy bien. La vida era un juego con él», precisa María Kodama.
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