BUENOS AIRES.- El presidente electo de Argentina, Mauricio Macri, acompañó hoy el traspaso de mando en la provincia de Buenos Aires, la más rica y poblada del país, horas antes de su ceremonia de asunción como jefe de Estado.
A primera hora de la mañana, Macri partió de su domicilio, ubicado en la capital argentina, y se desplazó en helicóptero hasta la ciudad de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires (unos 50 kilómetros al sur).
Pese a que está previsto que la ceremonia de asunción presidencial comience alrededor de las 11.00 horas (14.00 GMT), con el desfile del presidente electo desde su domicilio hasta el Congreso argentino, escoltado por el cuerpo de granaderos, Macri no quiso perderse la toma de posesión de la que ha sido una de las figuras clave para su triunfo electoral, María Eugenia Vidal.
Macri firmó como testigo en la jura de Vidal, que hizo historia en los comicios del pasado 25 de octubre al convertirse en la primera mujer electa para gobernar en este tradicional bastión peronista.
«No va a ser fácil, no vamos a cambiar todo en un día. No me voy a hacer la superpoderosa. Nos duele mucho el abandono que tiene la provincia. Recibimos una provincia quebrada, deficitaria, llena de deudas», dijo, durante su primer discurso oficial, la gobernadora conservadora, que también tuvo palabras de agradecimiento para los suyos y pidió un apoyo muy especial de todas las mujeres.
Vidal sucede al frente de la Gobernación de esta provincia, que aglutina a un tercio de la población argentina, a Daniel Scioli, quien fuera candidato peronista a la Presidencia del país, derrotado por Macri.