LA PAZ.- El presidente de la Cámara de Senadores de Bolivia, José Alberto Gonzáles, compareció hoy en un acto público con una pollera (falda) como las que usan las indígenas del altiplano para así desagraviar a las mujeres, después de que en un pueblo vistieran de ‘cholita’ a un alcalde como castigo por su mala gestión.
«Quiero desagraviar a la pollera y a las mujeres que usan pollera», dijo Gonzáles en una rueda de prensa en la que estuvo flanqueado por cuatro senadoras oficialistas que también vistieron a la manera tradicional.
Esta semana se conoció que líderes aimaras del altiplano boliviano obligaron al alcalde de Caquiaviri, Bruno Álvarez, a vestirse de mujer con las ropas tradicionales de las «cholas» paceñas como castigo por su mala gestión.
Álvarez fue obligado a ponerse una pollera amarilla, mantón del mismo color, un sombrero tipo bombín y un aguayo (tela empleada por las mujeres para portar mercancías o bebés a la espalda), los elementos principales que componen la vestimenta tradicional de las mujeres indígenas del altiplano boliviano, conocidas como ‘cholitas’.
El insólito castigo suscitó duras críticas tanto desde el Gobierno como desde asociaciones de defensa de los derechos de la mujer.
«No es la pollera lo que determina tu condición de vago, de ladrón o delincuente», sostuvo este viernes Gonzáles, ataviado con una falda de volantes en un tejido brillante de color gris, aunque sin el resto de las prendas que llevan las cholitas.
Para el presidente del Senado fue «desafortunado» que los líderes aimaras castigaran al regidor vistiéndolo de mujer.
«En el momento en que le pusieron esa pollera, estaban ofendiendo y maltratando a todas las mujeres» que usan esa prenda, agregó.
El machismo y la denigración de la mujer están profundamente arraigados en la sociedad boliviana, en especial en las zonas rurales.
Bolivia es, según datos del programa ONU Mujeres, el país latinoamericano con mayores tasas de violencia machista y el segundo después de Haití en violencia sexual.