SANTIAGO DE CHILE.- Una auditoría externa reveló la entrega de millonarios préstamos a parlamentarios chilenos por parte de la Cámara de Diputados, financiados con recursos del Congreso, admitieron hoy las autoridades de esa rama legislativa.
El informe, realizado por la consultora Ossandón & Ossandón, señaló que según el ejercicio contable de la institución el 2014 los créditos entregados durante ese periodo a seis diputados no consideran intereses ni reajustes, además de la posibilidad de devolución del monto de hasta 28 cuotas.
El estudio además desveló que la Cámara de Diputados presentó un descalce presupuestario por más de 1,000 millones de pesos (alrededor de 1.4 millones de dólares) el 2014.
De ese monto, 500 millones de pesos (unos 700,000 dólares) corresponden al no pago de imposiciones (seguridad social) que, según el documento, no habría sido informado de manera adecuada por parte de la administración y se consignó el 2015.
De acuerdo con las autoridades de la Cámara de Diputados, estas salidas de dinero corresponden a anticipos acordados de la dieta parlamentaria que estipula la Ley Orgánica Constitucional del Parlamento.
«No es un préstamo, es un adelanto de la remuneración», aseguró a los periodistas el presidente de la Cámara, Marco Antonio Núñez (foto), quien enfatizó que «desde hace un año y medio que no se realizan estos anticipos, porque efectivamente el Congreso no es para hacerle préstamos a sus funcionarios».
El estudio especifica que seis legisladores -Jaime Pilowsky, Claudio Arriagada, Marisol Turres, Cristián Campos, Jenny Álvarez y Diego Paulsen- de diversos sectores políticos, solicitaron préstamos a la Cámara por más de 150 millones de pesos en total (unos 210,000 dólares) entre 2013 y 2014.
Ante esto, la auditoría concluyó que «el registro contable de esta transacción es erróneo y poco transparente, ya que otorgar el préstamo se registra como un gasto, y no como una cuenta por cobrar a un tercero, lo que dificulta el control de esta».
En la misma línea, la consultora sugirió «analizar si existe la facultad para otorgar este tipo de préstamos, y si es así, definir quién lo autorizará y cómo se definirá el número de cuotas y reajustes».
Agregó que es necesario «instruir a que el registro contable sea el adecuado