Cerca de 400 presos extranjeros, internados en el penal «Sarita Colonia», podrán cumplir sus condenas en sus países de origen. Esta medida busca ayudar «a descongestionar los establecimientos penitenciarios» al retornar a sus países a los sentenciados extranjeros, que son cerca del 10% de la población carcelaria del país.
La decisión fue tomada por la Corte Superior de Justicia del Callao, en coordinación con 60 embajadas y consulados acreditados en Perú, según indicó la agencia oficial Andina.
La Corte Superior del Callao indicó que actualmente está vigente la Ley 30219, que crea y regula el beneficio especial de salida del país para extranjeros que cumplen pena privativa de la libertad por condenas menores a 7 años en cualquier penal del país.
Se precisó que entre las razones que permiten a un juez otorgar o denegar este beneficio especial está que no cuenten con arraigo domiciliario en su país y que tampoco tengan apoyo legal ni respaldo de sus familiares por estar lejos del Perú.
A finales del año pasado, el Instituto Nacional Penitenciario (Inpe) había anunciado que se reuniría con los cónsules de varios países para discutir sobre la aplicación de la Ley 30219, con el objetivo de establecer los protocolos para aplicar esta norma.
El ministro del Interior, José Luis Pérez Guadalupe, quien ocupaba por entonces la presidencia del Inpe, precisó que la norma era aplicable solo para los presos extranjeros con condenas hasta por siete años en delitos menores y solo si se trataba de su primera condena.
Además, los beneficiarios deben haber cumplido un tercio de su pena y tener buena conducta y no podrán regresar al país hasta 10 años después del término de su sentencia.
Las últimas cifras oficiales, indican que en Perú existen actualmente 1.730 extranjeros presos, de los cuales el 92% está procesado por tráfico ilícito de drogas.
En el penal Sarita Colonia, en el Callao, hay extranjeros de 54 nacionalidades diferentes, aunque gran parte de ellos son españoles.