BUENOS AIRES.- El precio de la carne en Argentina, país del asado, es hoy el eje de un debate entre el Gobierno, que cuestiona los aumentos en el sector, y los empresarios, que no descartan nuevas alzas.
«Hay que ver cómo va a estar el mercado, pero viene el aumento de la luz. Nosotros tenemos el gasto mayor en la corriente. No podemos apagar las heladeras. El aumento de la luz no lo va a pagar el carnicero, va al consumidor», dijo hoy el vicepresidente de la Asociación de Propietarios de Carnicerías de la ciudad de Buenos Aires, Alberto Williams, en diálogo con la radio Vorterix.
Williams también consideró que las próximas negociaciones salariales con los trabajadores del sector también podrían influir en eventuales alzas, pues los gremios piden entre un 35 y un 40 por ciento de aumento.
Las declaraciones de Williams llegaron después de que este fin de semana el ministro de Agroindustria de Argentina, Ricardo Buryaile, sostuviera que el kilo de asado «tendría que costar 90 pesos (unos 6.22 dólares)» en la venta al público, cuando actualmente se consigue a unos 110 pesos (7.60 dólares).
Los precios del asado «han bajado sustancialmente desde los 140 a 160 pesos (9.7 y 11 dólares) a los que había llegado en algunos comercios», dijo Buryaile, pero advirtió que «en algunos lugares no se adaptaron a la realidad».
«Hoy uno ve que ha bajado un 20 %, pero sigue estando caro para nosotros», agregó el ministro.
El precio de la carne no es el único que ha suscitado debate en el país suramericano, donde el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, calcula que la inflación solo en enero pasado se situó en el 3 %.
El presidente argentino, Mauricio Macri, anunció el sábado pasado que creará una comisión de defensa de la competencia y aseguró que el Gobierno va a «caerles duro a aquellos empresarios que abusaron de una posición dominante».
Otra de las medidas, según publica hoy el diario Clarín, será la creación de un sistema por el que los supermercados deberán publicar en Internet los precios de los productos para que los consumidores puedan hacer sus comparaciones.