ASUNCIÓN.- La organización de Miss Gordita seleccionó hoy a las 15 participantes que este año competirán por ganar el concurso paraguayo que pretende reforzar el autoestima de las mujeres discriminadas por tener sobrepeso u obesidad, un tema tabú en un país en donde esto afecta a seis de cada diez adultos.
Las seleccionadas entran en un programa gratuito de tres meses con charlas con especialistas en alimentación, psicólogos y visitas al gimnasio y concluye en una final con un desfile en el que un jurado elige a la Miss Gordita del año, explicó a Efe el escritor y organizador del evento, Mike Beras.
«Queremos fomentar el autoestima de las chicas, por eso el asesoramiento médico, no es para hacerlas bajar de peso, sino para que se acepten a sí mismas y se refuercen frente a la discriminación reinante para tomar ellas la decisión que quieran», explicó Beras.
Las concursantes tienen el compromiso con la organización de fomentar una vida saludable y luchar contra la discriminación. Entre las responsabilidades de la ganadora está ir a dar charlas a colegios y a reclusas para hablar sobre el sobrepeso, la obesidad y la discriminación que sufren muchas personas.
Seis de cada diez adultos paraguayos presentan sobrepeso y obesidad y uno de cada cuatro es obeso, de acuerdo con datos divulgados hoy por el Ministerio de Salud Pública que anunció el lanzamiento de una campaña para disminuir la obesidad en los próximos diez años en el país suramericano.
Participantes del certamen Miss Gordita Paraguay del 2014.
«La obesidad y el sobrepeso en Paraguay son un tabú. La sociedad solo acepta a las personas con sobrepeso cuando están haciendo dieta. No vas a ver a mujeres con unos kilos de más en televisión si no es para que se rían de ellas», aseguró Beras, productor brasileño radicado hace 23 años en Paraguay.
«Los medios paraguayos no escuchan, no nos dan espacio, solo quieren reirse y abochornarnos. Son la misma expresión de la discriminación«, añadió.
Beras dijo que tras cinco años celebrando el concurso los medios y los patrocinadores han empezado a tomar en serio su propuesta, pero afirmó que han tenido que abandonar platós de televisión porque querían humillar a la ganadora del 2015, Raquel Giménez Casco.
«Lo mejor de esto es ver el proceso de las chicas, del principio al final del proyecto cambia su autoestima drásticamente. Y son mujeres normales que después tienen que volver al trabajo en donde se las discrimina por su sobrepeso, a las tiendas en donde esconden la ropa de su talla», dijo.