BRASILIA.- La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, afirmó hoy que el país precisa «diálogo, comprensión y unidad» para hacer frente a la aguda crisis política y económica en la que se ha sumergido durante los últimos meses.
«Brasil pasa por una fase en que no es posible no ver que uno de los componentes que atrasan la retomada del crecimiento (económico) es la sistemática crisis política a la que, esporádicamente, el país es sometido», dijo en un acto celebrado en el Palacio presidencial de Planalto.
Según la mandataria, «la tolerancia y la pacificación en una sociedad son algo muy importante» y «los Gobiernos precisan de paz para poder tener las condiciones de enfrentar una crisis y retomar el crecimiento».
Rousseff también sostuvo que, aunque se contrajo un 3.8 % el año pasado y todos los pronósticos dicen que caerá en una tasa similar en el 2016, «la economía brasileña muestra señales de recuperación», lo cual aseguró que se refleja en una ligera reducción de la inflación.
«Tenemos una perspectiva de inflación cada vez menor», garantizó la presidenta, en contra de las previsiones de los analistas, que apuntan a que los precios aumentarán cerca del 8 % este año tras haber crecido casi un 10 % el 2016.
Rousseff atraviesa por uno de sus momentos más difíciles desde que llegó al poder, el 2011, y su popularidad se sitúa alrededor de un 11 %, según coinciden recientes encuestas.
Además, enfrenta una aguda crisis política generada por los graves escándalos de corrupción en la petrolera estatal Petrobras y un creciente malestar social producto de la severa crisis económica.
En ese escenario, la oposición ha solicitado la apertura de un juicio político con miras a su destitución, pero aunque el proceso comenzó a fines del año pasado, está temporalmente suspendido por unos «errores de procedimiento» detectados por la Corte Suprema.
Mientras el juicio político no se reinicia, grupos opositores han convocado a una gran jornada nacional de manifestaciones para el próximo domingo, cuando exigirán la renuncia o la destitución de la presidenta Rousseff.