Con una nutrida concurrencia de más de 10,.000 personas, en su mayoría miembros de organizaciones religiosas, se realizó la cuarta «Marcha por la vida», organizada por el arzobispado de Lima, convocada para «crear conciencia a favor de la vida y en contra del aborto«, informaron los organizadores.
La concentración se realizó en el cruce de las avenidas Brasil y Javier Prado, en el distrito de Magdalena del Mar, de donde los manifestantes marcharon hacia el circuito de playas de la Costa Verde, donde se presentó un espectáculo artístico y de fuegos artificiales.
«Esta actividad busca consolidarse como la mayor manifestación pacífica que se realiza en Perú con la finalidad de promover y defender la vida, desde la concepción hasta su fin natural, defendiendo el primer derecho que tienen todos los seres humanos: la vida», refirió uno de los organizadores.
La iniciativa se celebró en el marco del «Día del niño por nacer», instituido por una ley del Congreso de la República que se realiza el 25 de marzo de cada año.
El cardenal y arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, afirmó que la marcha se hizo para defender «el derecho a la vida» y que en Latinoamérica se debe rechazar «una fábrica, una campaña, una industria que se dedique a eliminar la vida en el vientre de la madre.»
Los padres de familia participaron activamente durante el desarrollo de la marcha.
«Eso que lo vengo de ver en varios países de Europa, no puede llegar a nuestro país, es inhumano. De eso no tenemos nada que aprender. El Perú está a la cabeza con otros países de Latinoamérica defendiendo la vida», aseguró.
El Congreso del Perú saludó el jueves la celebración de esta marcha, con una moción suscrita por el presidente del Legislativo, Luis Iberico, y un grupo de parlamentarios.
Numerosos fueron los jóvenes que se dieron cita en la «Marcha por la vida».
«No al aborto» fue el lema más coreado durante la marcha.