Al menos 300 organizaciones de la sociedad civil firmaron una carta en la que piden «salvar a la Comisiòn Interamericana de Derechos Humanos, CIDH y apelan a todos los Estados miembros de la OEA para que tomen las medidas necesarias que garanticen su funcionamiento.
En el documento destacan que el único mecanismo regional de protección de los derechos humanos enfrenta una crisis económica que podría derivar en la finalización de los contratos del 40% de su personal y el cese de las visitas a distintos países previstas para este año, si las naciones que integran la OEA no aportan fondos de manera urgente.
El organismo autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA) emitió el lunes un comunicado sin precedentes en el que asegura que si no recibe fondos o compromisos de donaciones antes del 15 de junio, será inevitable «el desmantelamiento de áreas esenciales en el cumplimiento de su mandato».
En el documento común emitido este viernes, se hace un «llamado urgente» para la creación de un fondo sostenible de financiamiento para los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH), a fin de atender la precaria situación que se viene dando desde hace años, tanto en la Comisión como en la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Amnistía Internacional, una de las organizaciones firmantes, explicó en un comunicado que se trata de proteger y asegurar «la continuidad del único mecanismo regional que supervisa las obligaciones en materia de derechos humanos de los miembros de la OEA y que constituye el último recurso de defensa con que cuentan los individuos en el continente frente a violaciones a los derechos fundamentales».
A pesar de su enorme importancia, la Comisión Interamericana ha contado, históricamente, con un presupuesto exiguo, que actualmente ha llegado al grado de comprometer la efectiva realización de sus funciones básicas y de su mandato, asignado por los Estados miembros de la OEA. (ECHA- Agencias)