DAMASCO.-En su retirada de varios frentes de batalla, el Estado Islámico secuestrò a 200 jóvenes en la provincia de Alepo para obligarlos a luchar contra el ejército sirio y la coalición kurdo árabe, en varios pueblos situados al oeste de la localidad de Manbech.
Esta medida extrema fue denunciada este domingo por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres, lo que demuestra la desesperación de los yihadistas que no han vacilado en utilizar mujeres, ancianos y niños como escudos humanos.
Las últimas redadas tuvieron lugar en el pueblo de Al Kauekli y en otros del municipio de Al Arima, 19 kilómetros al oeste de Manbech, de donde algunos jóvenes lograron huir antes de ser detenidos.
A las afueras de Al Kauekli, los miembros del ISIS colocaron bombas en las viviendas para impedir el avance de las tropas de la Fuerza Democrática Siria y evitar que refuercen su dominio sobre el camino estratégico que une Manbech, la ciudad de Al Bab y Alepo.
Los enfrentamientos entre ambos bandos prosiguen al oeste de Manbech, en la carretera que comunica con Al Bab, según el Observatorio. (ECHA- Agencias)