DAMASCO.- Tras intensos combates, el Estado Islámico asestó un duro golpe al régimen de Bashar al Assad al expulsar a las tropas sirias de la provincia de Raqqa, en contraofensiva que dejó decenas de muertos en las últimas 24 horas.
De esta manera los yihadistas lograron recuperar el control de uno de sus principales bastiones rechazando el ataque que las tropas sirias habían lanzado el pasado 3 de junio para apoderarse de la ciudad de Tabqa, clave para recuperar el control de Raqqa.
Las fuerzas del régimen habían logrado avanzar 20 kilómetros en la provincia antes de ser expulsadas por los yihadistas, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) con sede en Londres.
El Estado Islámico «logró expulsar a las tropas del régimen fuera de las fronteras administrativas de la provincia de Raqa después de una feroz contraofensiva lanzada el domingo por la noche», afirmó el OSDH en su comunicado. (ECHA – Agencias)