FLORIDA.- Un tribunal federal condenó a Aaron Richardson a 343 años de cárcel por el intento de asesinato a balazos del juez Timothy Corrigan, después que el magistrado testificara en el proceso sobre el tiro que le disparó en junio de 2013.
Dado que la víctima era un juez del distrito de Florida, se encargó del caso un juez del estado vecino de Alabama, quien impuso a Richardson en un tribunal de Jacksonville, en el noreste de Florida, una sentencia de 343 años de cárcel.
El juez que presidió el caso dijo, poco antes de anunciar la sentencia que tenía la “certeza virtual de que, si Richardson salía alguna vez de la cárcel, acabaría de nuevo en el sistema de justicia criminal”.
Fue un “intento descarado para asesinar a un juez federal para el propio beneficio personal de Richardson”, agregó.
Los fiscales del caso explicaron durante el juicio que cuando Richardson “disparó un tiro a través de la puerta corredera de cristal de la casa de Corrigan, afrontaba entonces la revocación de la libertad supervisada” por parte del citado juez, en relación con una “condena por intentar fabricar una bomba”.
“El ataque contra el juez Corrigan fue no sólo un ataque contra el hombre, sino un ataque a todo el sistema judicial federal y el Estado de Derecho”, dijo el fiscal Lee Bentle
La bala de rifle disparada por Richardson no alcanzó a Corrigan por unas pocas pulgadas, mientras se encontraba junto a su esposa en la casa viendo un programa de televisión pero el tiro atravesó dos paredes y una ventana, y los cristales rotos produjeron cortes menores al magistrado.
El ataque fue grabado por una cámara de seguridad de una tienda de deportes vecina y gracias a estas imágenes se pudo identificar a Richardson, que fue arrestado menos de 48 horas después del intento de asesinato del magistrado.(ECHA- Agencias)