La Asociación Nacional de Periodistas del Perú califica de grave atentado contra la libertad de prensa la denuncia interpuesta por el Ministerio de Defensa contra la directora y equipo periodístico del programa Panorama, emitido por Panamericana Televisión, a quienes acusan de la comisión del delito contra el Estado y la Defensa Nacional, atentados contra la seguridad nacional, traición a la patria y revelación de secretos nacionales.
Las periodistas Rosana Cueva Mejía, directora periodística, Karina Novoa Lescano y el equipo en su conjunto, en concordancia con el papel fiscalizador que corresponde a la prensa en toda democracia, difundieron un reportaje en el que se denunciaba un irregular manejo de fondos en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem). Los periodistas mostraron documentos que consignaban gastos militares para supuestos trabajos de Inteligencia realizados por el comando del Vraem, desembolsos que no se habrían llegado a realizar según testimonios presentados en el informe.
La ANP considera impropio que el Ministerio de Defensa en contrasentido a lo que le corresponde intente amordazar a los periodistas acusándolos de un delito que contempla penas de 15 años de cárcel en el ordenamiento jurídico nacional. La ANP defiende el derecho de los periodistas a investigar, demanda pleno respeto al derecho constitucional de reserva de fuentes informativas y llama a la sensatez al titular del Ministerio de Defensa. Una denuncia de este alcance no hace más que mancillar una gestión de gobierno que podría terminar llevando a periodistas a prisión por el hecho de hacer su trabajo.
Acusaciones de traición a la patria y revelación de secretos de Estado nos retrotraen a las épocas más oscuras del país en las que se atacaba con insanía al mensajero sin valorar en su real dimensión el mensaje. La ANP considera una aberración el querer camuflar como revelación de secretos de Estado la denuncia de actos de corrupción. Para el gremio los periodistas no han cometido delito alguno, toda vez que el reportaje no revela un secreto nacional que afecte la seguridad nacional. Además, según la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública, la información calificada de secreta debe haber sido considerada así con anticipación y ese no ha sido el caso.
Por ello, la ANP expresa su solidaridad con los periodistas de Panorama y hace un llamado a las organizaciones nacionales e internacionales que promueven y defienden la libertad de expresión a responder unitariamente ante este atropello. Ningún periodista puede ir a prisión por denunciar la corrupción. Por el contrario, debemos exigir que existan garantías para que los periodistas puedan hacer su trabajo sin miedo ni temor y los ciudadanos satisfacer su derecho a estar informados.