ASUNCIÓN.- La directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa Etienne, hizo hoy un llamado a contener las enfermedades transmitidas por alimentos contaminados en la región, donde 14,000 personas mueren al año por esa causa, en la inauguración de la Reunión Interamericana de Salud y Agricultura.
«Tan solo en la región de las Américas, 14,000 personas pierden la vida cada año debido a los alimentos contaminados y unos 77 millones de personas se enferman, casi una de cada tres de ellas menores de cinco años», dijo Etienne en Asunción, donde se celebra el evento, a cuya apertura asistió el presidente paraguayo, Horacio Cartes.
Añadió que el encuentro, que dura hasta el viernes, debe de servir para que los participantes contribuyan a fortalecer los componentes fundamentales de sistemas eficaces de inocuidad de los alimentos, y con ello frenar los daños humanos y económicos provocados por esas enfermedades.
«Además de este sufrimiento, las enfermedades transmitidas por los alimentos ejercen una presión considerable sobre nuestros sistemas de atención de salud, reducen la productividad y dan lugar a pérdidas económicas sustanciales para la industria del turismo y los productores y exportadores de alimentos», dijo Etienne.
Delegaciones de unos 35 países toman parte en la 17 Reunión Interamericana a Nivel Ministerial en Salud y Agricultura (Rimsa 17), que comenzó con el traspaso de la presidencia a Paraguay por parte del representante saliente de Chile, Claudio Ternicier.
La reunión tratará, entre otras cuestiones, sobre las mejoras nutricionales de la cadena alimentaria, la erradicación de la fiebre aftosa y la prevención de las zoonosis.
Etienne también se refirió a la estrecha vinculación existente entre el sector de la salud y el agrícola y ganadero, algo demostrado con la aparición y la propagación de diversas zoonosis y enfermedades como el ébola, el chikunguña y el zika.
En ese sentido, instó a los expertos reunidos en la capital paraguaya a elaborar una hoja de ruta encaminada a lograr una «gobernanza intersectorial eficaz para prevenir y controlar las zoonosis».
«Ustedes tendrán que abordar en estos dos días la manera en que se pueden integrar las iniciativas del sector de la salud y del sector de la agricultura y ganadería para reducir con mayor eficacia los riesgos y controlar los brotes de las enfermedades zoonóticas tanto en los animales como en los seres humanos», dijo.
Matizó que esa hoja de ruta es solo una parte de un reto más amplio, consistente en generar herramientas de colaboración entre la agricultura, la ganadería y la salud para avanzar hacía los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible, que buscan erradicar el hambre y asegurar la salud de la población.
Bajo el lema «Una Salud y los Objetivos de Desarrollo Sostenible», Rimsa 17 también tratará sobre la amenaza que representa el aumento de la resistencia a los antimicrobianos, que según Etienne tiene como una de sus causas un «uso inapropiado» tanto en los seres humanos como en los animales.
Etienne destacó que la mayor parte de los 77 millones anuales de casos de enfermedades de transmisión alimentaria se deben a agentes patógenos transmitidos por los animales destinados al consumo, como las bacterias campylobacter y la salmonela no tifoidea.
«Ya estamos viendo las consecuencias sumamente graves para la salud humana de la resistencia cada vez mayor a los antibióticos. En Brasil, Bolivia y Perú, más de la mitad de las infecciones intrahospitalarias son causadas por agentes patógenos resistentes», afirmó Etienne.
La reunión recoge las conclusiones de otras dos celebradas esta semana en Asunción, la dedicada al combate contra la fiebre aftosa y una segunda en la que se trazaron planes de acción para la mejora de la inocuidad de los alimentos en la cadena alimentaria.
EFE