QUITO.- El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, arremetió hoy contra ciertos militares en activo y en situación de retiro que desconocen su autoridad y que efectúan comentarios insultantes contra él.
Visiblemente molesto, Correa, en su habitual informe de los sábados por radio y televisión, criticó también que un Consejo de Disciplina de las Fuerzas Armadas no sancionara al capitán de corbeta Edwin Ortega, a quien acusó de haberle faltado al respeto.
El mandatario señaló que ayer viernes presentó un recurso de «amparo constitucional» frente a ese Consejo de Disciplina que absolvió al soldado, bajo el argumento de que el demandante (Correa) no era militar ni su superior.
Correa recordó que la Constitución y las leyes militares establecen que el Presidente de la República es la máxima autoridad de las Fuerzas Armadas.
Todo surge, señaló, por una reforma que el Ejecutivo estudia para el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa), por ciertas distorsiones en el régimen de pensiones que favorecen a los generales en detrimento de las jubilaciones de la tropa, entre otras cosas.
Puso como ejemplo el hecho de que un general se jubila con unos 5,000 dólares mensuales, monto que se compone con un 60% por parte del Estado y supone ocho veces más que el de un militar de tropa, mientras que el salario mínimo para el resto de la población es de 366 dólares.
Por ello indicó que hay intereses creados en las críticas y ofensas que recibieron por su propuesta de reforma, pero indicó que no las permitirá.
«Quiero advertirle al pueblo ecuatoriano (que) la situación es realmente seria, tensa», admitió Correa y se preguntó: «¿Quién manda aquí, el poder civil legítimamente electo, con legitimidad democrática, o ciertos poderes fácticos?».
Señaló que lo más fácil para él sería mirar a un costado, pues recordó que dejará el poder en mayo del próximo año, pero dijo que actuará con firmeza en este caso porque está en juego la República.
Comentó que por proponer las reformas al Issfa, «se dieron a la ingrata tarea algunos oficiales, pasivos por su puesto, pero también algunos activos, de insultar al presidente Correa» y añadió que «ahora, que se busca la sanción para esos oficiales, hubo la consigna de dejarlos en la impunidad con el argumento que el Presidente no es su superior».
Es decir, «si insultan a un general, entonces están fritos, pero si insultan al Presidente no», agregó el mandatario al insistir en que con esa actitud se niega «la Constitución, los fundamentos de la República».
Agregó que el Consejo de Disciplina no niega que el capitán de la Armada insultó al Presidente, «lo que justifican es que Correa no es superior militar».
Incluso puso como ejemplo la destitución de un sargento de la Marina de Estados Unidos porque escribió en redes sociales una ofensa contra el presidente Barack Obama.
El mandatario llamó a la población a estar atenta sobre las implicaciones de la situación y cuestionó que el oficial involucrado en el caso lo llamara «mentiroso» y que no se meta con la institución castrense.
«Todos, si es necesario a las calles para rechazar esta inmoralidad», añadió el gobernante tras remarcar que, como le faculta la Constitución, podría incluso destituir al alto mando militar.
«Si tengo que gobernar con tenientes, lo haré, aunque lamentablemente algunos tenientes también están en esto», añadió y dijo que «estos soldados antipatriotas tendrán que salir de las Fuerzas Armadas».
«Aquí yo me juego la vida, si es necesario», subrayó Correa y reiteró su pedido a la población y a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) a estar atentos y a respaldar la Constitución y la Democracia.
Rafael Correa siempre ha sido un ferviente partidario de los reclamos de Argentina a las Islas Malvinas, pero ¿cuáles son los puntos fuertes de la reclamación de la soberanía? ¿Y qué acerca de los derechos democráticos de los isleños?
La soberanía de las Islas Malvinas: https://www.academia.edu/17799398/Falklands_-_Some_Relevant_International_Law_Spanish_