PARÍS.– Casi un tercio de los musulmanes de Francia presenta un perfil «ultra» y «rigorista», indica un sondeo difundido este domingo que subraya que la buena integración de ese colectivo en el país es mayoritaria, pero ve una tendencia preocupante entre los más jóvenes.
El estudio, efectuado por el instituto demoscópico Ifop para el Instituto Montaigne, un laboratorio de ideas independiente, ofrece uno de los retratos más amplios hasta la fecha sobre ese colectivo, y acaba también con algunas ideas preconcebidas.
Empezando por su cifra en el país, que sitúa en entre 3 y 4 millones, lejos del 10 % de la población calculado hasta ahora, y entre los que el 50 % son franceses de nacimiento, un 74 % tiene nacionalidad y un 66 % otorga gran importancia a la religión.
Se trata de un grupo social particularmente joven, en el que el 84 % tiene menos de 50 años y hay una media de edad de 35,8 años, añade ese sondeo, efectuado entre los pasados 13 de abril y 23 de mayo, y difundido este domingo por el diario Le Journal du Dimanche.
La población musulmana, según ese semanario, está marcada por el «fervor» de su juventud, que respeta los ritos y sus prohibiciones más que sus antecesores.
Ifop interrogó a 1.029 personas de confesión o ascendencia musulmana sobre aspectos como el porte del velo o el consumo de carne «halal».
De ese estudio emanan tres perfiles principales: un 46 % de laicos, un 25 % que se definen ante todo como musulmanes pero defienden el laicismo, y un 28 % de «ultras», con partidarios del niqab, el burka o la poligamia.
En ese último grupo están sobrerrepresentados los jóvenes (50 % de los menores de 25 años), los parados y aquellos en situación precaria.
El sondeo se difunde en pleno debate sobre la reorganización del islam en Francia tras los recientes atentados yihadistas en el país y destaca que el consumo de productos «halal» y el porte del velo son las principales señales que marcan la identidad.
En ese último caso las mujeres son más conservadoras: un 70 % es favorable a que una mujer lleve el pañuelo y un 28 % el velo integral (niqab o burka), frente a porcentajes respectivos del 58 % y del 20 % surgidos del bando masculino.
Del estudio se desprende también que un tercio de los musulmanes de Francia acude cada semana a la mezquita, otro tercio no va nunca y el tercio restante solo en las fiestas religiosas.
Más allá de sus prácticas, según se añade, su principal preocupación es el empleo, pero en términos generales aparecen como menos comprometidos políticamente: uno de cada dos dice que votará en las presidenciales de 2017, frente al 62 % del conjunto de los franceses.
EFE/ Foto EFE