SANTIAGO DE CHILE.- La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, anunció hoy que ha retirado una querella por injurias y calumnias que presento el pasado mayo contra la revista Qué Pasa, tras la publicación de un artículo que la involucraba en un caso de corrupción.
La mandataria, en un diálogo con los periodistas a su llegada a La Moneda, sede del Ejecutivo, precisó que tomó la determinación luego que el semanario fue sancionado por el Consejo de Ética de los Medios de Comunicación.
«La revista ha sido sancionada y con eso yo me doy por satisfecha», señaló la mandataria.
La acción legal se presentó tras una publicación en la edición electrónica de la revista, reproducida parcialmente en la edición de papel, de unas supuestas declaraciones de un implicado en el llamado «Caso Caval», que involucra al hijo de Bachelet, Sebastián Dávalos, y a su esposa, Natalia Compagnon, acusados de tráfico de influencias y uso de información privilegiada.
Caval, de la que Compagon es socia, compró unos terrenos rurales que serían urbanizados en la región de O’Higgins, vecina a Santiago, y luego los vendió con una millonaria ganancia.
Juan Díaz, un operador político vinculado a la derecha política e implicado en el caso, decía en las declaraciones publicadas por Qué Pasa que la presidenta chilena recibiría 1.000 millones de pesos (unos 1,51 millones de dólares) en el negocio.
Bachelet dijo hoy que su objetivo con la querella «nunca fue afectar a los periodistas ni ganar dinero», pero subrayó que la decisión de querellarse fue correcta.
«Yo toda la vida he defendido la libertad, la democracia, he ido hasta presa. Creo en la libertad de prensa, pero creo que esa libertad de prensa tiene que estar basada en un periodismo serio, riguroso, porque eso es lo que fortalece a nuestra democracia», señaló.
El libelo estaba dirigido al director de la revista y a los periodistas responsables de la publicación, y Bachelet, que fue criticada por haber recurrido a los tribunales, insistió hoy en que la resolución del Consejo de Ética de los medios era «lo suficientemente contundente» para dar marcha atrás.
«La revista ha sido sancionada», concluyó respecto de dicha resolución, emitida el pasado 14 de septiembre, que sostiene que la publicación afectó a los involucrados en la misma y a los propios lectores.
El Consejo dictaminó que la revista deberá publicar un extracto del fallo «sin incorporar comentarios adicionales», y recomendó a los medios «el contraste de la información obtenida», dar a los aludidos la posibilidad de exponer su versión, de modo de resguardar su derecho a la presunción de inocencia.