WASHINGTON.- El saliente presidente de EEUU, Barack Obama, abolirá un programa nacional de registro creado para rastrear a inmigrantes provenientes de países donde hay grupos terroristas activos, que su sucesor, Donald Trump desea reabrir.
El portal especializado en temas políticos The Hill, menciona que la medida está dirigida probablemente a enviar un fuerte mensaje al mandatario electo, Donald Trump, poco antes de que ocupe la Casa Blanca a partir del 20 de enero próximo.
El registro, creado después de los atentados del 11 de septiembre del 2001, no se usa en la práctica desde el 2011, por lo que el movimiento es simbólico y parece dirigido a distanciar la administración saliente de cualquier esfuerzo de Trump por revivir el programa, sostuvo The New York Times.
Interrogado sobre si todavía tenía intención de establecer un control de los musulmanes e imponer una prohibición temporal a su entrada al país, el multimillonario dijo desde Florida: «Ustedes conocen mis planes».
Poco después su equipo apuntó que el magnate no hacía referencia a sus anteriores llamamientos a prohibir la inmigración desde países musulmanes, sino a su más reciente aclaración de que vetaría a provenientes de naciones con historia de extremismo islámico.
Se dejó usar hace 5 años
Neema Hakim, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, expresó que esa entidad dejó de usar el registro hace más de cinco años porque se determinó que era redundante, ineficiente y no proporcionaba ningún aumento en la protección.
Un informe del 2012 indicó que la información obtenida de huellas dactilares, manifiestos de vuelo, documentos de viaje e identificación y fuentes de inteligencia era más valiosa para determinar quién representa un posible riesgo.
Sin embargo, el secretario de Estado de Kansas y miembro del equipo de transición de Trump, Kris Kobach, quien ayudó a diseñar el programa durante el gobierno de George W. Bush (2001-2009), fue fotografiado recientemente con un documento que propone la reintroducción del registro.
Ese hecho y los comentarios del mandatario electo llevaron a que legisladores demócratas, alcaldes de ciudades con grandes poblaciones nacidas en el extranjero y algunos líderes de empresa tecnológicas pidieran a Obama deshacerse del marco legal del proyecto.
El Times considera que este movimiento es una de las acciones que se toman en las últimas semanas de la actual administración para prevenir, o al menos retardar, lo que los demócratas temen que pueda ser un rápido retroceso de los esfuerzos del presidente Obama en inmigración y cambio climático. (ECHA – Agencias)