Atlético Tucumán derrotó en la víspera 1-0 a El Nacional y avanzó a la fase 3 de la Copa Libertadores. En el partido de ida el equipo criollo había logrado un empate 2-2 con el decano.
El logro del elenco argentino estuvo plagado de una insólita aventura que empezó en el aeropuerto de Guayaquil donde por más de dos horas estuvo varado sin poder viajar a Quito.
Fernando Zampedri festeja con la mirada al cielo el gol de Atlético Tucumán, que avanza en la Libertadores. pic.twitter.com/OxHWGCtEVx
— SportsCenter (@SC_ESPN) February 8, 2017
Una vez superado el impase el equipo argentino estuvo a un instante de perder el partido por W.0. Los jugadores no hicieron el precalentamiento y encima habían llegado sin la utilería por lo que lograron prestarse un juego de la selección argentina Sub 20.
Al grito de “Dios es justo”, el entrenador de Atlético Tucumán se despidió de la prensa luego de un partido cargado de emociones. El equipo argentino obtuvo el triunfo usando camisetas alternas, sin calentar y hasta con chances desperdiciadas, una verdadera odisea para jugar la Copa Libertadores.
El drama de Atlético Tucumán comenzó durante las horas de la tarde, el equipo argentino estaba listo para salir con rumbo a Quito para disputar el partido de vuelta con El Nacional por la Copa Libertadores.
El entrenador Pablo Lavallén y sus jugadores estuvieron dos horas en el aeropuerto a la espera de poder despegar. Sin embargo, por alguna razón su vuelo se retrasó y el técnico asegura que hubo ‘alguien’ que no quería que se jugara el partido.
Fernando Zampedri, el autor del único gol del partido, también se pronunció ante los medios: “Gracias a Dios es lo que logramos hoy, no fue un día nada fácil para nosotros. Estuvimos dando vueltas de acá para allá, no sabíamos si íbamos a jugar, eso nos hizo sacar algo más de adentro, la verdad que el grupo se merece esto. Emocionado por cómo se dio el partido y el día. Estamos muy contentos”.