CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco criticó este domingo «la búsqueda obsesiva de bienes terrenales y de las riquezas», tras asegurar que las tentaciones de «reducir todo al dinero, al placer y al poder son apremiantes».
«No pueden servir a Dios y a la riqueza. O al Señor, o a los ídolos fascinantes pero ilusorios”, mencionó el Papa Francisco desde la ventana del palacio apostólico, momentos antes del rezo del Ángelus, en el último domingo del tiempo ordinario antes de empezar este miércoles 1 de marzo el tiempo de Cuaresma.
El Papa Francisco afirmó que esta es una elección que se debe renovar continuamente «porque las tentaciones de reducir todo al dinero, al placer y al poder son apremiantes», unos ídolos que, añadió, «portan resultados tangibles y al mismo tiempo fugaces».
Finalmente, el Papa Francisco criticó aquellas actuaciones dirigidas a apoyarse «en bienes inmediatos y contingentes, olvidando y a veces rechazando el bien supremo, el amor paterno de Dios».
«Nos alejamos del amor de Dios cuando vamos hacia una búsqueda obsesiva de bienes terrenales y de las riquezas, manifestando así un amor exagerado a esta realidad», subrayó el Papa Francisco.
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