EsSalud advirtió que los niños de 15 años ya no son los más propensos a la adicción a los videojuegos en dispositivos móviles, sino los de 12 años. Entre los factores que incrementan la dependencia está el fácil acceso de los jóvenes a los celulares. En muchos casos los padres permiten el acceso como una forma de calmar la irritabilidad de los menores.
Los síntomas para determinar si un niño padece de esta adicción son la poca tolerancia a la frustración, lo que puede causar una suerte de condicionamiento que asocia la ansiedad con el videojuego, y el bajo rendimiento académico entre los escolares por la ansiedad de pasar más horas frente a las pantallas.
EsSalud recomendó a los padres de familia acompañar al menor para calmar su ansiedad cuando deja el aparato, y evitar las agresiones verbales o físicas como medio para disminuir el uso de estos dispositivos.
Pese a ello EsSalud sostuvo que aunque estos productos tecnológicos han pasado a formar parte de la vida diaria, los padres deben estar atentos a la frecuencia de exposición de sus hijos a estos dispositivos. (A.T.A.)