Sinsabores. La ex conejita Holly Madison contó que casi se quitó la vida en el baño de la mansión Playboy, cuando era la “predilecta” de Hugh Hefner.
Trascendió que Holly Madison narra en su libro Down the Rabbit Hole: Curious Adventures and Cautionary Tales of a Former Playboy Bunny, que se publicará el 23 de junio, su tórrido pasado. Desde que se fue de su casa en Oregon para terminar siendo una de las “clásicas” conejitas en la popular mansión Playboy. Ella se convirtió en la mujer que dormía junto a Hugh Hefner, «un hombre con la edad suficiente para ser mi abuelo».
Según detalló a People, Holly Madison no pasó un buen tiempo en la conocida mansión, ya que la competencia con las otras mujeres y el constante drama la llevaron a una profunda depresión. Su vida al interior de la casa de Hugh Hefner era miserable y no glamorosa como la gente lo ve desde fuera. «Todos creen que la reja de metal es para mantener a todos fuera, pero llegué a sentir que era para mantenerme a mí encerrada», indica.
En 2002 pensó en quitarse la vida, cuando estaba en su bañera. «Si sólo pongo mi cabeza bajo el agua y respiro profundo, todo terminaría», pensó Holly Madison en aquel entonces.
«Aprendí que Hef (Hugh Hefner) era manipulador y que nos ponía una en contra de la otra. Me dí cuenta que no me trataba bien. Pero ya estoy harta de temerle a las personas. Ya no le tengo lealtad a Hef, no he hablado con él en cuatro años, así que tampoco hay razón como para ponernos en contacto. Además, es la verdad», añade.
«Estaba ahí, en blanco y negro. El testamento decía que cuando él (Hefner) muriera, Holly Madison obtendría tres millones de dólares, sólo si seguía viviendo en la mansión… Pero no lo quería. No pude evitar sentirme ofendida, ¿de verdad creía que me podía comprar? Puse la carpeta en la cama tal como la había encontrado y nunca hablé una palabra de eso», cuenta en el libro.