PANAMÁ.- Un juez panameño decidió hoy prolongar de manera indefinida el arresto domiciliario concedido al exdictador Manuel Antonio Noriega, que se encuentra en cuidados intensivos desde hace dos meses tras una cirugía cerebral.
La jueza de cumplimiento de la provincia de Chiriquí, Katherine Pitti, le otorgó el pasado 28 de enero el beneficio de un arresto domiciliario temporal para que se preparara para la operación en los 3 casos por los que cumple más de 60 años de condena en Panamá.
Pitti resolvió el pasado 9 de mayo mantener el arresto domiciliario durante un año por el caso de la desaparición y asesinato del médico opositor Hugo Spadafora, en 1985, y este jueves el juez Roberto Sánchez prolongó la medida cautelar de manera indefinida en los otros dos casos, la matanza de Albrook y la muerte del militar opositor Moisés Giroldi, en 1989.
A Noriega, de 83 años, le fue extirpado el pasado 7 de marzo un tumor benigno en el cerebro y, tras sufrir una hemorragia a las pocas horas, tuvo que ser sometido a una segunda operación.
Desde entonces, se encuentra ingresado en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Santo Tomás, el más grande del país, y son muy pocas las informaciones que trascienden sobre su estado de salud, ya que tanto su familia como su defensa mantienen un gran hermetismo con los medios.
«En cuanto al estado médico solo se puede decir que mantiene una situación crítica», dijo a los periodistas tras finalizar la audiencia de control el abogado del exdictador, Ezra Ángel.
Panamá: Jueza concede 3 meses de prisión domiciliaria a exdictador Noriega
Noriega, que gobernó con puño de hierro el país entre 1983 y 1989 y fue derrocado por una invasión estadounidense, fue extraditado a Panamá el 11 de diciembre del 2011 tras cumplir más de 20 años en la cárcel en Estados Unidos y Francia por narcotráfico y blanqueo.
Hasta el pasado enero, cumplía más de 60 años de condena en la cárcel de El Renacer, a las afueras de la capital.
En el 2010, la Justicia panameña abrió una nueva causa penal en su contra por su presunta responsabilidad en la desaparición, en 1970, y posterior muerte del dirigente izquierdista Heliodoro Portugal, pero el juicio está suspendido desde hace un año por los problemas de salud que aquejan al exdictador y que aparecieron antes de la operación.