JERUSALÉN/Israel.- Decenas de miles de palestinos de Jerusalén Este y los restantes territorios ocupados acuden hoy a la mezquita Al Aqsa, en Jerusalén, para participar en la oración del mediodía del primer viernes de Ramadán.
El Ejército israelí tiene instrucciones de permitir el acceso desde Cisjordania a los hombres mayores de 40 años, las mujeres sin límite de edad y los niños menores de 11 años.
Las Fuerzas de Seguridad israelíes han desplegado a centenares de soldados y policías en los accesos a Jerusalén, así como dentro de la Ciudad Vieja, donde se halla la mezquita Al Aqsa, y en los demás barrios palestinos del este ocupado de la ciudad.
Palestinos musulmanes rezan junto a la cúpula de la mezquita Al Aqsa en el primer viernes del Ramadán en Jerusalén (Israel) hoy, 2 de junio del 2017. EFE/ALAA BADARNEH
«La Policía de Fronteras y unidades de patrullas especiales serán destacadas en todas las zonas para permitir a miles de personas llegar a la Ciudad Vieja y al mismo tiempo impedir que ocurran incidentes de seguridad», informó el portavoz policial israelí, Miki Rosenfeld.
La Policía palestina, por su parte, ha desplegado un gran número de unidades en los controles que comunican Cisjordania con el área de Jerusalén, informó la agencia de noticias palestina Maan.
El teniente coronel Luai Arziqat, portavoz de la Policía palestina, ha instado a los feligreses a que se desplacen con cuidado y sin provocar avalanchas con el fin de facilitar la circulación de todos los que hoy se dirigen a la Explanada de las Mezquitas, donde se sitúan Al Aqsa y la Cúpula de la Roca.
EFE