LONDRES/Reino Unido.- Las personas no británicas que se vieron afectadas por el incendio el pasado 14 de junio del bloque de pisos Grenfell de Londres podrán quedarse en el Reino Unido al menos doce meses, al margen de su estatus de inmigración, dijo hoy el gobierno británico.
El secretario de Estado de Interior, Brandon Lewis, indicó que la medida pretende que las víctimas tengan tiempo «para hacer frente a las difíciles circunstancias» del incendio, que causó al menos 80 muertos al propagarse rápidamente por el edificio de 24 plantas, debido al revestimiento inflamable de la fachada.
«El gobierno ha dejado claro que nuestra prioridad es que las víctimas de la tragedia accedan a los servicios que necesitan, al margen de su estatus de inmigración», afirmó el político conservador.
La portavoz laborista de Interior, Diane Abbott, defendió que los afectados reciban la residencia permanente, pues, argumentó, la idea de que serán deportados tras padecer un suceso como éste es «grotesca».
Por otra parte, el gobierno ha pedido que se pongan en contacto con las autoridades los supervivientes del incendio que estaban subarrendados en el bloque de protección oficial, a fin de establecer correctamente la cifra de víctimas.
El ministro de Comunidades y Gobierno Local, Sajid Javid, señaló que estos inquilinos en situación irregular no afrontarán consecuencias.
Javid admitió ayer que «el Estado falló» a los ocupantes de la torre Grenfell del oeste de Londres y dijo que el fuego, causado por una nevera defectuosa pero que se extendió con facilidad, sin que hubiera protección antiincendios, «jamás debió haber sucedido».
El ministro prometió que la investigación pública del suceso «llegará al fondo del asunto», y adelantó que pudo haber «fallos de personas, fallos de organizaciones y fallos de la política pública a todos los niveles que se remontan a décadas atrás».
EFE/Foto: archivo CV