El colegiado B de la Sala Penal Nacional declaró “complejo” el juicio oral seguido contra el exmilitar, Jorge Eduardo Miranda Gutiérrez, acusado de la desaparición del exsubteniente del Ejército y presunto espía, Marco Roberto Barrantes Torres, ocurrido en marzo de 1988.
Barrantes Torres fue sindicado por sus superiores de ese entonces, de vender información del Ejército peruano, clasificada como “secreta”.
El tribunal adoptó esta decisión a pedido del fiscal superior Juan Maza, quien fundamentó su requerimiento debido a la gravedad del delito, el número de testigos que serán citados a declarar, la cantidad de pruebas que serán actuadas, entre otras dificultades.
En la audiencia de hoy el representante del Ministerio Público acusó a Miranda Gutiérrez de ser autor del delito contra la humanidad en la modalidad de desaparición forzada en agravio de Barrantes Torres.
El fiscal señaló que el acusado habría participado en la elaboración y ejecución del plan de operaciones “Lucero”, preparado por el Servicio de Inteligencia del Ejército (SIE), con el fin de capturar y secuestrar a agentes militares acusados de vender información reservada del Ejército.
Según el relato fiscal, Barrantes Torres fue sacado de su domicilio ubicado en el sector de Condevilla (distrito de San Martín de Porres) y luego fue conducido al SIE, en el Pentagonito, desconociéndose su paradero desde ese momento.
Por estos hechos, el fiscal solicitó a la sala –presidida por la jueza Miluska Cano López, e integrada por los jueces Omar Pimentel Calle y Otto Verapinto Márquez– imponer una pena de 25 años de cárcel y el pago de una reparación civil de S/ 100 mil.
Luego de escuchar la acusación, y a instancia de la presidenta del tribunal, el acusado expresó que no se acogerá al procedimiento de conclusión anticipada, y por el contrario, declaró su inocencia de los cargos que le imputa el fiscal.
En ese estado, el colegiado suspendió la audiencia que será reanudada el próximo 10 de enero a las 9:30 horas.