BUENOS AIRES.- Organizaciones de derechos humanos de Argentina volvieron a protestar hoy contra la decisión judicial de concederle el beneficio de la prisión domiciliaria a Miguel Etchecolatz, condenado a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura en el país (1976-1983).
Tal como ya sucedió este viernes, las protestas volvieron a darse hoy en la ciudad de Mar del Plata (400 kilómetros al sur de Buenos Aires), donde el expolicía bonaerense, uno de los represores más conocidos del último régimen de facto, fijó su domicilio tras abandonar la prisión la semana pasada.
En medio de un fuerte dispositivo policial, los manifestantes se convocaron a las puertas de la casa de Etchecolatz, lanzaron consignas reclamando que vuelva a la cárcel y tiraron bombas de estruendo.
En la tarde de hoy, las organizaciones tienen previsto marchar entre los Tribunales Federales de Mar del Plata y un popular paseo público de esa ciudad.
A finales de diciembre pasado, un tribunal concedió el beneficio de la libertad domiciliaria a Etchecolatz, de 88 años, cuya defensa había alegado que el expolicía padece «entre otras patologías crónicas, hipertensión arterial y adenoma de próstata que requiere de caterización permanente».
El excomisario, que estuvo a cargo de la Dirección General de Investigaciones de la Policía de la provincia de Buenos Aires entre 1976 y 1978, ha sido condenado en seis juicios, cuatro veces a prisión perpetua, y tiene varios procesos abiertos.
En 2014, durante un juicio oral, Etchecolatz admitió haber asesinado a perseguidos políticos durante el régimen de facto, aunque dijo no recordar «a cuántos».
«Por mi cargo y jerarquía me tocó matar, pero no sé a cuánta gente», declaró.
EFE/Foto: diariopopular.com.ar