El congresista peruano Marco Arana, líder del Frente Amplio, anunció hoy que planteará la derogación de una ley aprobada recientemente en el Congreso que plantea la construcción de carreteras en áreas sensibles de la Amazonía, lo que pone en riesgo áreas naturales protegidas y pueblos indígenas.
La ley 30723, aprobada en diciembre por el parlamento, controlado con mayoría absoluta por el fujimorismo, declara de «prioridad e interés nacional la construcción de carreteras en zonas de frontera y el mantenimiento de trochas en el departamento de Ucayali«, situado en la frontera de Perú con Brasil.
Arana denunció que la norma «afecta zonas donde se encuentran comunidades indígenas y amazónicas» y advirtió que fue aprobada sin contar con el visto bueno de la comisión parlamentaria de Pueblos Andinos, Amazónicos, Ambiente y Ecología que él mismo preside.
La ley fue aprobada por el pleno del Congreso el pasado 15 de diciembre y promulgada el 22 de enero por el mismo presidente del parlamento, el fujimorista Luis Galarreta, después de que el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, no lo hiciera en el período que tenía estipulado.
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones aseguró en un comunicado emitido el pasado viernes que no tiene planeada la construcción de carreteras en la zona fronteriza de Ucayali, ni tampoco registro alguno de trochas en la zona.
Recordó que el Congreso «no es el poder del Estado encargado de ejecutar las inversiones en construcción y mantenimiento de infraestructura vial» y aclaró que el marco legal vigente establece que cualquier proyecto de infraestructura vial no puede afectar las áreas naturales protegidas ni a las comunidades nativas.
Entre las carreteras más conflictivas propuestas en la norma está un trazado para unir los municipios de Puerto Esperanza (Ucayali) e Iñapari (Madre de Dios), a lo largo de 277 kilómetros de frontera entre Perú y Brasil.
Esa infraestructura pone en riesgo 275.000 hectáreas de bosque primario y tres áreas críticas para los pueblos indígenas en aislamiento voluntario y la biodiversidad: la reserva territorial Madre de Dios, el Parque Nacional Purús, y la reserva comunal Purús, según el Proyecto de Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP).
El MAAP recordó que la carretera interoceánica, que atraviesa la amazónica región de Madre de Dios, es el principal vector de deforestación en la zona con un fuerte impacto en un radio de cinco kilómetros a ambos lados de esa vía.
EFE/Foto: mongabay.com