BUENOS AIRES.– El diario argentino La Nación señaló que, tras la contundente victoria de 6-1 sobre Paraguay llega el gran momento para la selección albiceleste que el sábado definirá ante Chile, en Santiago, en un partido a todo o nada en el que los locales buscan por primera vez alzar la corona.
En Concepción jugó su mejor partido en el torneo y celebró a lo grande con los tantos de Rojo, Pastore, Di María (2), Agüero e Higuaín, señala Tomás Bence en su crónica que, a continuación, reproducimos en parte.
El corazón de la selección está caliente. Hace frío en Concepción, pero la Argentina siente el calor de una noche de fiesta. Es alegría, satisfacción plena. Está en el aire y a las puertas de poner fin a esa racha maldita de 22 años sin títulos. El conjunto nacional se metió en la gran final de la Copa América con una goleada 6-1 ante Paraguay , en la que mostró todo su potencial.
Sin dudas, su mejor actuación en este torneo, en el que había empezado con dudas. Ahora, llega el gran momento: el sábado definirá ante Chile, desde las 17, en Santiago, en un partido a todo o nada en el que los locales buscan por primera vez alzar la corona.
La final será el sábado, a las 17, ante Chile, en Santiago; la Argentina buscará su 15a Copa América, título que no consigue desde 1993
Esta vez, el optimismo de Ramón Díaz no fue suficiente para un Paraguay que tocó su techo al alcanzar las semifinales y definirá el tercer puesto ante Perú el viernes. Nada de je, ninguna picardía, el rostro del riojano parece petrificado en ciertos tramos del partido.
Como nunca en toda la Copa América , quedó plasmado el clima hostil entre hinchas argentinos y chilenos, quienes silbaron el Himno nacional cuando se escuchó en el estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción, minutos antes de que comenzara el partido ante Paraguay.
Apenas se anunció por altoparlantes hubo un estruendoso rechazo, similar al que se percibió cuando se anunció la alineación de la selección y se nombró a cada uno de los jugadores del conjunto nacional. Durante el primer tiempo, con el resultado favorable, los hinchas argentinos le apuntaron a los chilenos cantando «¡El que no salta es un inglés!», en clara referencia a Malvinas.
La gran final
La noche es de la Argentina, pese a la resistencia de los hinchas chilenos, de los silbidos al himno, de los cánticos en contra. Se siente en el aire el duelo que se avecina en la gran final contra los locales, esa definición en la que la selección sueña poder pasar de página de una vez por todas y que aquella Copa América de Ecuador 1993 ya no sea la última. Se perdieron las finales de 2004 y 2007, no se pudo en Brasil 2014, tampoco en las copas confederaciones de 1995 y 2005.
Es la hora que el poster amarillento de Batistuta y Ruggeri levantando la Copa le dé lugar al de Messi, Mascherano, Di María, Agüero y esta generación que está ansiosa por devolverle la gloria al seleccionado. (ECHA )