Tras causar polémica por posar sonriente y mostrar uno de sus dedos pulgares en alto durante una visita al hospital donde están los heridos de la masacre en una escuela de Florida, el presidente Donald Trump asistió ese mismo día a una fiesta temática con música disco en Mar-a-Lago.
“El presidente Trump y la primera dama se detuvieron en una fiesta disco al estilo Studio 54 en el salón de baile de Mar-a-Lago anoche (viernes) tras volver de la oficina del Sheriff de Broward”, dijo el reportero de la Casa Blanca de CNN, Kevin Liptak en su cuenta de la red social Twitter .
Una foto publicada en Instagram capturó a la primera pareja sentada y charlando mientras la gente socializaba a su alrededor en una habitación iluminada con luces del complejo turístico de Trump, informó a su vez el Huffingtonpost el sábado en la noche.
“Tenga en cuenta que el presidente NO bailó”, comentó el usuario de Instagram Sean Bianca antes de que la foto se retirara más tarde el sábado y su cuenta de Instagram se cambiara a privada. “Él y la Primera Dama estuvieron allí por un corto tiempo, pero ninguno estaba bailando como debía de esperarse. Su humor era sombrío y estuvieron allí durante muy poco tiempo”.
La aparición de la pareja en la fiesta fue confirmada en Facebook por el prominente abogado de bancarrota de Florida David Lloyd Merrill, informó el Huffingtonpost.
“El presidente llegó”, escribió Merrill, quien asistió a la fiesta después de escuchar que Trump asistiría. “No pude reunirme con él o hablar, pero estaba a unos 3’ de distancia. ¡Genial, sin importar tu afiliación política!”, dijo.
La noticia de la fiesta generó otra polémica en las redes sociales donde las personas expresaron su rechazo por considerar que Trump debió suspenderla debido a la tragedia que golpeó a Florida y a todo Estados Unidos por la masacre que cometió Nikolas Cruz, de 19 años, en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas High School el 14 de febrero. (ECHA- Agencias)