YAKARTA.- Las autoridades de Indonesia elevaron hoy a 131 el número de muertos en el terremoto de magnitud 6.9 que sacudió el domingo la isla de Lombok, donde miles de afectados aguardan alimentos, agua y refugios tras perder sus casas.
El portavoz de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB), Sutopo Purwo Nugroho, dijo en rueda de prensa que otras 1.467 personas han tenido que ser hospitalizadas a causa de las heridas y elevó a 156.000 el número de desplazados.
La mayoría de las víctimas mortales, 78, ocurrieron en el norte de Lombok, la zona más próxima al epicentro, donde unas 42.000 casas y edificios se derrumbaron y los servicios de emergencia se esmeran en encontrar supervivientes o recuperar cadáveres.
El resto de víctimas se registraron en la zona occidental de Lombok (24), en la parte oriental (19), en Mataram, la principal ciudad de la isla (6), en el centro (2) y en Denpasar, en la vecina isla de Bali (2).
En la carretera que lleva al norte de la isla se pueden ver las bajas construcciones derrumbadas y a vecinos pidiendo dinero para ayudar a las víctimas con cajas de cartón.
Decenas de heridos son tratados en tiendas de lona improvisadas junto al hospital de Tanjung, en el noroeste de la isla, ya que el centro resultó dañado por el temblor y fue desalojado.
La ayuda ha llegado a muchos de los supervivientes, pero aún hacen falta alimentos, agua y tiendas de campaña en lugares de difícil acceso.
Lombok, surcada por campos de cultivo y jungla tropical y dominada por el volcán Rinjani, tiene unos 4.500 kilómetros cuadrados y está situada junto a la turística isla de Bali.
EFE