BUCAREST.- Una protesta contra la corrupción, donde se exigía la dimisión del Gobierno del Partido Socialdemócrata, acabó este viernes en violentos enfrentamientos de los manifestantes con las fuerzas policiales que dejaron el saldo de 172 heridos.
Los manifestantes, principalmente emigrantes, se congregaron frente a la sede del Gobierno en Bucarest, reuniendo entre 30.000 y 50.000 personas de acuerdo a la prensa local.
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De acuerdo a la versión oficial, el enfrentamiento, en el cual la policía empleó gas lacrimógeno y los manifestantes han lanzado objetos contundentes como piedras o botellas, se desencadenó cuando algunos de los manifestantes intentaron superar el cordón que protegía la sede del Gobierno.
El número de participantes en la marcha fue creciendo desde primeras horas de la tarde, con muchos rumanos residentes en países como Alemania, Francia, Italia y España que se han desplazado a Bucarest para participar en la protesta, y visitar a la familia por las vacaciones estivales.
También se celebraron protestas similares en ciudades como Cluj-Napoca, Timisoara, Sibiu e Iasi, entre otras.
Alrededor de tres millones y medio de rumanos, de una población de 20 millones, trabajan actualmente en el extranjero —la mitad en España e Italia—, y envían más de 4.000 millones de euros en remesas, según las autoridades.
Entre gritos de «Gobierno de ladrones», «Dimisión» y «La diáspora está en casa porque le importa», los manifestantes, en su mayoría residentes en el extranjero, exigieron la dimisión del Gobierno del Partido Social Demócrata (PSD) por la corrupción y la carestía de la vida. (ECHA- Agencias)