Panamá: Pretensión de censura a medios enturbia comicios generales 2019

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PANAMÁ.- Las críticas y pedidos de censura a los medios de comunicación y sitios de internet panameños de parte de los políticos enturbian el incipiente proceso electoral de cara a los comicios generales del 2019.

La campaña «No a la reelección», iniciada por ciudadanos y sitios de internet y que busca que ninguno de los diputados vuelva a ser votado en mayo próximo, más la pretensión de la exprimera dama Marta de Martinelli de que se prohíba que los medios publiquen los apellidos de la familia por «maltrato psicológico», alarmaron.

Una joven diputada oficialista, Katleen Levy, ha sido blanco de críticas porque, supuestamente, pidió al Tribunal Electoral de Panamá que castigue a las redes sociales por promover el rechazo indiscriminado a la reelección – a la que ella pretende aspirar- lo que le llevó a acudir a su cuenta en Instagram a aclarar su posición.

«Ya uno no puede confiar en lo que publican los medios de comunicación», expresó el jueves la política capitalina, quien señaló que el diario local La Prensa publicó «lo que quiso» de su participación en una sesión en la que cuestionó a los magistrados electorales atribuyéndole querer censurar las redes sociales.

Según Levy, les pidió a los magistrados pronunciarse sobre el uso de las redes sociales para hacer campaña sucia o negativa porque ellos promueven un «pacto ético digital» para hacer respetar el proselitismo con respeto en el ciberespacio.

«Yo no estoy a favor ni defiendo la reelección», «no defiendo a la clase política», apuntó, y reconoció que «no me tengo por qué molestar», si en su jurisdicción no es reelegida.

También denunció a la página «elcuara.com» que, dijo, le ataca permanentemente porque «el señor que maneja la cuenta me mandó un mensaje que si le pagaba mensualmente 700 dólares no me atacaban y si quería que hablara bien de mí y de mis obras, tenía que pagar 1,000 dólares».

«A eso es lo que me opongo», acotó, tras recordar que ella también fue «influenciadora» en redes sociales, «pero para cosas positivas», por las que «hacía canje y cobraba», en fechas que no precisó.

«Tampoco estoy en contra de las personas que están haciendo su campaña de no a la reelección», aseguró.

Lamentó que la campaña afirma de los políticos que «todos somos malos, todos somos maleantes, nos tiran a la misma bolsa».

Su colega diputado pero del opositor Partido Revolucionario Democrático (PRD), el periodista Javier Ortega, también criticó en el pleno de la Asamblea Nacional la magnificación en sentido negativo que hacen los medios panameños de la labor de los diputados por «rating».

La campaña «No a la reelección» tomó fuerza cuando la Contraloría General reveló supuestos malos manejos de fondos del Estado por parte de los diputados con plantillas desconocidas por la sociedad, en la que se contrata a familiares y otras personas al parecer para pagar favores políticos y que la mayoría se ha negado a identificar.

El magistrado presidente del Tribunal Electoral, Heriberto Arauz, dijo que se pronunciarán sobre la «queja» presentada por Levy pero que hay que «analizar el tema del derecho a la libertad de expresión versus los derechos políticos de los funcionarios electos y capaces de reelegirse».

Por su lado, la familia Martinelli Linares aspira que los tribunales prohíban al diario La Prensa que se les mencione por «protección familiar y a la imagen familiar en situaciones de índole privado».

El detenido expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014), dos de sus hijos, y otros familiares, son investigados por la justicia por varios casos de corrupción contra el Estado panameño durante la pasada administración.

El Foro de Periodistas y el Consejo Nacional de Periodismo, que agrupan a la mayoría de gremios locales, dueños de medios y escuelas de periodismo, alertaron de la petición por ser «un peligro» para la libertad de expresión.

Ambos gremios pidieron al Órgano Judicial estar «en alerta», porque se pretende «abusar del sistema institucional de justicia, como una herramienta de censura, intimidación y persecución».

EFE/ Luis Miguel Blanco

 

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