BUENOS AIRES.- En plenas negociaciones con el FMI e inversores, el presidente del Banco Central de Argentina, Luis Caputo, presentó su carta de renuncia al mandatario, Mauricio Macri, aduciendo motivos personales en un comunicado de tres párrafos.
El directivo, integrante del círculo íntimo del mandatario Mauricio Macri, alegó “motivos personales” para justificar su sorpresiva renuncia ante la prensa minutos antes de la apertura de los mercados.
Su alejamiento no sólo ha dado con Macri fuera del país sino también a las puertas de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), clave para que Argentina supere la crisis económica que ha hundido su moneda más de un 50% desde enero.
Además coincide con una huelga general, la cuarta que los sindicatos peronistas realizan contra el presidente, precisamente para protestar por los ajustes que exige el acuerdo con el Fondo.
El sustituto de Caputo al frente del banco emisor será Guido Sandleris, número dos del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y un hombre clave en las negociaciones con el FMI.
Caputo asumió el cargo el pasado 14 de junio, después de la renuncia de Federico Sturznegger y de que el Gobierno unificase el Ministerio de Finanzas, del que Caputo era titular, con el de Hacienda.
Su llegada al instituto emisor fue vista como un triunfo de los sectores más cercanos a Macri, hasta el punto de que se temió un deterioro de la independencia de una entidad para la que es clave la autonomía del Ejecutivo.
Caputo enfrentó la crisis cambiaria de finales de agosto, cuando el peso se depreció hasta 15% frente al dólar en una sola jornada. El banco central subió entonces las tasas de interés del 45% al 60%, récord a escala global, y aplicó intervenciones controladas en el mercado pese a las reticencias del FMI, que cuando en junio aprobó un rescate de 50.000 millones de dólares para Argentina puso como condición un escenario de flotación libre de la divisa. (ECHA- Agencias)