ATENAS- Violentos enfrentamientos se registran en la simbólica plaza Syntagma, en momentos que el Parlamento de Grecia apresuraba los debates para aprobar este miércoles el duro acuerdo con acreedores de la eurozona. (Ampliación)
La sesión parlamentaria comenzó con un primer acuerdo: la votación del controvertido acuerdo, que amenaza con quebrar la coalición gobernante de Syriza, se realizará antes de la medianoche, lo que significa que el debate se limitará a poco más de tres horas.
El tratamiento avanzaba en un clima de apuro y tensión, sin la presencia del primer ministro Alexis Tsipras, mientras que el nuevo ministro de Finanzas, Euclides Tsakalotos, volvió a defender el acuerdo y el duro y masivo ajuste que representará.
VIDEO: Frontline view from #Athens. Clashes continuing #GreeceCrisis – @DanhawkinsDh https://t.co/3xmlRXn8Q5
— Conflict News (@Conflicts) July 15, 2015
«No sé si hicimos lo correcto. Pero creo que sentimos que no teníamos otra opción», sentenció el ministro que negoció el acuerdo junto con Tsipras en un maratónico fin de semana, que terminó con una cumbre de líderes de la eurozona de 17 horas, según el portal de noticias local The Press Project.
Tsipras aceptó un tercer programa de ayuda europeo aún más neoliberal que el rechazado por el 61% de sus compatriotas en un referéndum hace sólo una semana, que le garantizará 86.000 millones de euros en los próximos tres años y el «compromiso» de discutir una reestructuración de la deuda griega, que ya supera el 180% del PBI nacional.
Las manifestaciones de protesta empezaron antes del mediodía. (Foto: agencia Xinhua)
A cambio de una nueva inyección de dinero que permita recapitalizar los bancos griegos, poner fin al corralito y pagar los cercanos vencimientos de deuda con los acreedores europeos y cumplir con la cuota atrasada del FMI, Tsipras aceptó un fuerte aumento del IVA, un recorte de las jubilaciones, una reforma del mercado laboral y del Código Civil y un descarnado e inédito proceso de privatizaciones.
Este acuerdo preliminar es el que debe ser aprobado este miércoles a más tardar por los diputados griegos para que los ministros de Finanzas de la unión monetaria, o Eurogrupo, empiecen a negociar los detalles del texto final del tercer programa de ayuda financiera de la Unión Europea (UE) a Grecia en cinco años.
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El viernes pasado, cuando el Parlamento griego tuvo que aprobar la última propuesta del gobierno de Tsipras a los acreedores europeos, el premier heleno perdió el apoyo de 17 diputados de la bancada de Syriza que rechazaron el texto por considerar que era muy similar al ajuste rechazado en el referéndum.
Como si esto no fuera suficiente para instalar un clima de tensión entre el oficialismo, el ministro de Reconstrucción Productiva, Planificación y Energía, Panagiotis Lafazanis, y el parlamentario y economista Kostas Lapavitsas, y, una vez más, el diputado y ex ministro de Finanzas, Yanis Varufakis, hicieron público su desacuerdo y su repudio al nuevo ajuste impulsado por Alemania y aceptado por Tsipras.
Además, 109 de los 201 integrantes del comité central de Syriza emitieron un duro comunicado, en el que calificaron al acuerdo como «un golpe de Estado», según la agencia de noticias EFE.
Finalmente, los sindicatos de empleados públicos, uno de los sectores sociales que más apoyaron la llegada al poder de Tsipras y Syriza, realizaron este miércoles el primer paro nacional contra el actual gobierno, una medida que sin embargo, no tuvo una gran adhesión, especialmente en el transporte público.
En el caso de Syriza, se estima que hasta 30 diputados podrían votar en contra del acuerdo y no está claro si estos continuarán apoyando al gobierno de Alexis Tsipras.
Bu akşam #Yunanistan Parlamentosu önünde çatışmalar…
via @stratosathens: pic.twitter.com/q5fK7yj3rC— Evren Dede (@evrendede) July 15, 2015
Prueba de ello es que la Juventud de Syriza fue una de las organizaciones que convocó y lideró la masiva y pacífica protesta que comenzó a congregarse frente al Parlamento, en la simbólica plaza de Syntagma.
Sindicalistas, militantes de izquierda, comunistas, anarquistas y simpatizantes del gobierno se unieron para pedir otra vez un «no» al ajuste.
Justo cuando el debate comenzaba dentro del Parlamento, en la plaza unos pocos manifestantes lanzaron bombas molotov y piedras, a lo que la policía anti motines respondió reprimiendo a toda la multitud con gases lacrimógenos.
La furgoneta de TV junto a nosotros ardiendo. Qué feo se está poniendo esto en Syntagma pic.twitter.com/9WFnlIZLD9
— Principia Marsupia (@pmarsupia) July 15, 2015
En el medio de la confusión, una camioneta de un canal de televisión griego se prendió fuego, dos manifestantes fueron detenidos y varias calles fueron cerradas con improvisadas barricadas, según informó la cadena de noticias Telesur. (ECHA- Agencias)