Paul Allen hizo grande el sueño americano. Siendo un adolescente conoció en el colegio a otro friki de la informática como él, Bill Gates, y juntos formaron Microsoft, un monstruo tecnológico que cuatro décadas después sigue siendo una fuerza dominante en el mundo de los ordenadores.
Allen ha fallecido en Seattle a causa de un linfoma, según confirmó su hermana Jody. Tenía 65 años.
«Mientras que la mayoría conocimos a Paul Allen por su faceta como tecnólogo y filántropo, para nosotros era un muy querido hermano y tío, además de un amigo excepcional», indicó en un comunicado.
«La familia y los amigos de Paul estuvieron bendecidos por haber experimentado su ingenio, calor, generosidad y su profunda implicación».
Hace tan solo semanas, Allen comunicó que estaba siendo tratado de la enfermedad, el mismo tipo de cáncer al que logró sobreponerse nueve años antes.
«Con profunda tristeza anunciamos la muerte de nuestro fundador Paul G. Allen, cofundador de Microsoft y destacado tecnólogo, filántropo, constructor de comunidades, conservacionista, músico y partidario de las artes», afirmó Vulcan en un comunicado, la firma de inversión que ahora ocupaba el tiempo del magnate de Washington.
Bill Gates y Paul Allen, en un partido de la NBA en 2003.
Además de sus vínculos con Microsoft y Vulcan, Allen era el dueño de dos equipos profesionales en Estados Unidos, los Portland Trail Blazers de baloncesto y los Seattle Seahawks de la NFL.
También tenía fuertes inversiones en el mercado inmobiliario y el campo aeroespacial.
Allen, que formó parte de la junta de Microsoft hasta el año 2000, se ha despedido con una fortuna personal que ronda los 20.000 millones de dólares, incluyendo 100 millones de títulos de la corporación que fundó junto a Gates.
Fuente: elmundo.es/Foto:eluniversal.com.mx