El Perú es un hermoso país, con gente amable y con un buen sentido del humor, así que esta colección de bromas harán que tengas un buen momento, recordemos que no tienen nada que ver con otros aspectos, solo es humor y al igual que otras, no deben tomarse para nada en serio. Muy por el contrario.
COMPARTIR
Una pareja de ancianos va a un restaurante de comida rápida, donde con cuidado divide en dos la hamburguesa y las papas fritas. Un camionero siente pena por ellos y se ofrece a comprarle a la esposa su propia comida.
—No se preocupe —dice el anciano—, nosotros compartimos todo.
Unos minutos después, el camionero se da cuenta de que la esposa no ha probado bocado.
—De verdad no me importa comprarle su propia comida —insiste.
—No se preocupe, ella comerá su parte —le asegura el anciano—. Lo compartimos todo.
Poco convencido, el camionero le pregunta a la esposa:
—¿Por qué no come?
—¡Porque estoy esperando a que mi esposo me preste la dentadura!
EL DEL PAN
—Deme dos barras de pan, por favor. Y si tiene huevos, dos docenas.
Y le dio VEINTICUATRO BARRAS DE PAN.
TARDANZA
Entran 2 chicos al aula, y la maestra le dice a uno de ellos:Alumno, ¿por qué llegó tarde?Es que estaba soñando que viajaba por todas partes, conocí tantos países, y me desperté un poco tarde.¿Y usted, alumno?¡Yo fui al aeropuerto a recibirlo!
EL INCENDIO
Una mujer regresa de comprar y se encuentra su bloque de pisos ardiendo por los cuatro costados.
“¡Ay mi marido, ay mi marido, que me lo he dejado en el sofá!”, le grita a un bombero la señora.
“No hay nada que hacer, todos los inquilinos han muerto calcinados. Lo siento señora”, dice él.
Y ella le pide al bombero: “Déjeme reconocer a mi esposo, por favor, quiero verlo por última vez”.
“Es imposible señora”, responde el bombero. “Los cuerpos han quedado irreconocibles”.
Y ella insiste: “Déjeme por favor, si yo toco a mi marido por la zona de ‘abajo’, lo reconoceré por el ‘temario’, estoy segura”.
El bombero, por compasión, accede a su petición y lleva a la señora donde están los cadáveres tapados con mantas. Y ella empieza a ‘tocarlos’ para intentar reconocer al marido.
“Éste no es mi marido… Éste tampoco… Vamos, éste no es ni del bloque, habrá venido de visita”.
NOMBRE
– Hija, lo que hiciste no tiene nombre!
– Todavía no Papi, ¡pero espérate 9 meses y le pongo uno bien bonito!
EL PAYASO
Un payaso le pide un aumento de sueldo a su jefe y este le contesta:
– ¡Qué grande, veinte años trabajando juntos, y esta es la primera vez que me haces reír!
DE LOCOS
¿Para quién es esa carta?, le dice el director de un manicomio a un loco que está escribiendo.
Para mí mismo.
Y, ¿qué te pones?
¡Cómo quieres que lo sepa si aún no la he recibido!
VELORIO
El viejo acaba de morir.
El cura en la ceremonia se manda con los elogios:
– El finado era un buen marido, excelente cristiano, un padre ejemplar!!…
La viuda voltea hacia uno de sus hijos y le dice al oído:
– Anda al cajón y mira si es tu papá el que está adentro.
EL GATO
Un gato caminaba por un tejado maullando:
—Miau, miau.
Otro gato se acerca y le dice:
—¡Guau, guau!
El primer gato extrañado le dice:
—Oye, ¿por qué ladras si tú eres gato?
Y el otro le contesta:
—¿Es que uno no puede aprender idiomas?
PRÍNCIPE AZUL BUSCANDO ESPOSA
Una vez el Príncipe Azul estaba buscando esposa, y quería una esposa virgen.
Fue con Rapunzel, le propuso matrimonio y ella dijo que si.
Se sacó el miembro y le preguntó:
“Mi amor, ¿qué es esto?”
Ella respondió:
“Oh, es tu pene mi príncipe.”
No se casó con ella, siguió buscando y trató con todas las princesas y personajes de los cuentos:
“Cenicienta, Blanca Nieves… etc” .
Cuando fue con Caperucita Roja también le propuso matrimonio y ella aceptó.
Se sacó el miembro y le preguntó:
“¿Qué es esto?”
Ella le respondió:
“Eso es un honguito, mi principe.”
El se levantó y dijo:
“¡Esta es mi esposa!”
En la luna de miel él se sacó el miembro y le dijo:
“Verás, querida, esto es mi pene y…”
Ella lo interrumpió y dijo:
“¡Ja ja ja, eso es un honguito… pene es el del lobo!”