CIUDAD DE PANAMÁ.- América Latina tiene la oportunidad de aprovechar la Ruta de la Seda que promueve China en la región para dar un salto cualitativo en su desarrollo y potenciar sus exportaciones con valor agregado a un mercado asiático que en un par de décadas será el mayoritario en el mundo, dijo hoy un experto.
Se trata del estratega en inteligencia competitiva y economista, entre otros títulos, Eddie Tapiero (foto), quien esta anoche presentó su obra «La Ruta de la Seda y Panamá, escenario prospectivo estratégico entre América y China» en el que plantea el rol que su país puede jugar para sacarle provecho a la expansión china.
El escritor, parte del equipo negociador del tratado de libre comercio entre Panamá y China, pero un experto por más de dos décadas en cuestiones financieras estratégicas en la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), también planteó que «hace sentido» que se abra el Tapón del Darién para comunicar a todo el continente.
El Tapón del Darién es la selva intrincada que separa a Panamá de Colombia por vía terrestre y es el único tramo donde la carretera Panamericana se interrumpe en su recorrido entre Alaska y Tierra del Fuego.
Tapiero, panameño, consideró que la región tiene «la tarea urgente» de mejorar el funcionamiento de sus instituciones para poder aprovechar el plan chino de establecer vínculos comerciales fuertes y «de respeto» con el continente.
Añadió que Panamá puede ser el punto de encuentro para potenciar las exportaciones hacia el mercado asiático y, a la vez, armonizar el intercambio de bienes con su socio tradicional que es Estados Unidos, que actualmente tiene un diferendo con los chinos en materia comercial que amenaza las operaciones del canal interoceánico.
«Con este libro espero ayudar a mejorar el conocimiento acerca de los avances de China en el mundo y apoyar a que los países tomen decisiones más informadas con respecto a la iniciativa de la Franja y la Ruta», sostuvo el autor, quien tomó cinco años para desarrollar su investigación.
Anotó que existe «mucho desconocimiento» sobre que es China actualmente y sobre el estereotipo de país comunista, «cuando la realidad es que funciona de un modo más capitalista que otros».
Desestimó también que el afán chino sea «imperialista» porque, con su milenaria tradición histórica, ha demostrado que «no está invadiendo países» para expandir su mercado o «inventando una guerra», como se ha vivido en otras latitudes y más bien quiere un estado de bienestar para que sus socios le puedan comprar.
En sus casi 250 páginas, la obra desglosa la historia de China, los retos que tiene que enfrentar América Latina para integrarse comercialmente con el gigante asiático, las oportunidades que se le presentan y finaliza con el papel de Panamá en la Ruta de la Seda.
EFE/Foto: elcapitalfinanciero.com