WASHINGTON.- El Departamento de Tesoro de EEUU anunció este jueves sanciones económicas contra 17 altos funcionarios sauditas presuntamente vinculados con el asesinato del periodista, Jamal Khashoggi, incluyendo asesores del príncipe heredero Mohamed bin Salman.
En un comunicado precisó que todos los sancionados «formaron parte de los planes y la ejecución» de la operación que terminó con el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en Estambul, quedando fuera del listado el príncipe heredero Mohamed bin Salman, sin precisar mayores detalles.
«Los funcionarios sauditas que estamos sancionando estuvieron involucrados en el aborrecible asesinato de Jamal Khashoggi. Estas personas que atacaron y mataron brutalmente a un periodista que residía y trabajaba en los Estados Unidos deben enfrentar consecuencias por sus acciones», destacó el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
El funcionario exigió a la monarquía petrolera que «realice los pasos apropiados para finalizar la persecución de disidentes políticos o periodistas».
Además indicó que la operación fue «coordinada y ejecutada» por su subordinado, Maher Mutreb, quien fue secundado por Salah Tubaigy, Meshal Albostani, Naif Alarifi, Mohammed Alzahrani, Mansour Abahussain, Khalid Alotaibi, Abdulaziz Alhawsawi, Waleed Alsehri, Thaar Alharbi, Fahad Albalawi, Badr Alotaibi, Mustafa Almadani, Saif Alqahtani, y Turki Alsehri.
Por último, el gobierno estadounidense sancionó a Mohammed Alotaibi, quien era el cónsul general durante el asesinato del periodista y entre los oficiales sancionados está Saud al-Qahtani, un colaborador cercano del príncipe Mohammed bin Salman,
El ex cónsul de Arabia Saudita en Estambul, Mohammed Alotaibi, figura entre los funcionarios sancionados
En consecuencia, «cualquier propiedad de estos individuos que estén bajo jurisdicción estadounidense queda bloqueada», mientras que se prohíbe a los ciudadanos norteamericanos que participen en transacciones que los involucren.
Por su parte, el secretario de Estado, Mike Pompeo, indicó que el asesinato resultó en «serios abusos de derechos humanos» y destacó que los individuos ocupan puestos en la Corte Real, ministerios y oficinas del gobierno saudita.
«El Departamento de Estado continuará buscando todos los hechos relevantes, consultará al Congreso y trabajará con otras naciones para hacer responsable a los involucrados en el asesinato», añadió.
La Casa Blanca evitó durante varias semanas emitir una condena contra Arabia Saudita y la monarquía, acusada de haber orquestado el crimen.
Washington y Riad sostiene una larga alianza estratégica clave para Medio Oriente, aunque el vínculo bilateral ha sido puesto bajo evaluación ante la ola de críticas contra el reino. (ECHA- Agencias)