MÁLAGA.- Con palabras emocionadas, Juan Rossello, reiteró su esperanza en que su hijo, el pequeño Julen atrapado desde el domingo en un estrecho túnel, será rescatado con vida.
“Tenemos un ángel que va a ayudar a que salga vivo lo antes posible”, dijo tras criticas a la falta de medios de comunicación en un primer momento, pero ahora ha reconocido que “empieza a ver la luz” por el avance en la operación.
Los padres de Julen, el pequeño de dos años que cayó hace once días a un pozo de más de 100 metros de profundidad en Totalán (Málaga), están «fuertes» y afrontando esta última fase «con mucha fuerza», explicó Juan José Cortés, el padre de Mari Luz, la niña de cinco años que murió asesinada en 2008 en Huelva.
«Me han dicho que no han perdido la esperanza en ningún momento», ha asegurado Cortés, que lleva desde el primer día apoyando a los padres del pequeño; apuntando que estos no han tenido contacto directo con los ocho mineros procedentes de Asturias, que harán manualmente una galería horizontal para conectar el túnel vertical realizado con el pozo en el que está Julen.
Ya ha comenzado a desplegarse el dispositivo de rescate, formado por los ocho efectivos de la Brigada de Salvamento Minero de Hunosa, diez guardias civiles –ocho especialistas de Montaña y dos de Actividades Subacuáticas– y ocho bomberos del Consorcio Provincial de Málaga.
Esta tarde ha tenido lugar una vigilia en una explanada de la localidad, pedida por la familia, para «dar fuerza a los mineros, a Julen y a sus padres». «Seguramente sea la última noche que Julen esté allí», comentó esperanzado. (ECHA- Agencias)