SANTIAGO DE CHILE.- La justicia chilena condenó este lunes a siete exagentes de la Central Nacional de Informaciones (CNI), aparato represor de la dictadura de Augusto Pinochet, por su responsabilidad en el crimen de un opositor de izquierda en plena vía pública, en 1986.
Según fuentes judiciales, fue la Corte de Apelaciones de Santiago la que decretó la sentencia a los siete represores por la autoría del homicidio en el asesinato de Juan Díaz Cliff, perpetrado el 18 de abril de 1986, en el municipio santiaguino de Recoleta.
La CNI fue la policía política y organismo de inteligencia, que funcionó como órgano de persecución, secuestro, asesinato y desaparición de opositores políticos y que reemplazo en 1977 a la temible Dirección de Inteligencia Nacional (DINA).
En fallo unánime, los jueces condenaron a Álvaro Corbalán Castilla, que ya suma más de 100 años de presidio por violaciones a los derechos humanos, a la pena de 10 años y un día de presidio, en calidad de autor del delito.
En tanto, Jorge Jofré Rojas, Víctor Ruiz Godoy, José Salas Fuentes y Carlos Palma López, deberán purgar 5 años y un día de presidio, como coautores.
Asimismo, los agentes Eduardo Fuenzalida Pérez y Ema Ceballos Núñez fueron condenados a 3 años y un día de presidio, con el beneficio de la remisión condicional de la pena, como cómplices del crimen.
Según la investigación realizada por el ministro en visita (juez especial) Mario Carroza, el 18 de abril de 1986 dos equipos de la denominada brigada azul de la CNI, decidieron interceptar a un transeúnte -Juan Díaz Cliff-, militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), que circulaba por el municipio de Recoleta con destino a su domicilio.
En el operativo, dos de los agentes de uno de estos equipos, con el apoyo de dos agentes del otro equipo, bajan de los vehículos que les trasladaban y al ver a Díaz Cliff, extraen armas de fuego y con ellas le disparan al cuerpo.
Según la indagatoria, el militante del MIR recibió cinco disparos, uno de los cuales le perforó el pulmón derecho, ocasionándole anemia grave que finalmente le causó la muerte.
Durante la dictadura militar (1973-1990), unos 3.200 chilenos murieron a manos de agentes del Estado, de los que 1.192 figuran aún como detenidos desaparecidos y otros 40.000 fueron torturados y encarcelados por causas políticas.
EFE/Foto: cooperativa.cl