El 2 de abril de 1982 las Fuerzas Armadas argentinas desembarcaron en las islas Malvinas y recuperaron ese territorio arrebatado por fuerzas británicas en 1833. Esta acción militar provocó una fuerte respuesta de primera ministra británica Margaret Thatcher, quien envió un gran contingente de barcos, aviones y soldados. La guerra duró 74 días y terminó con la rendición del país austral el 14 de junio. El saldo del combate fue de casi 1.000 muertos, de los cuales 650 fueron argentinos.
La fecha conmemorativa se creó en el año 2000 con el nombre del Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas. Desde junio de 2006 es un feriado nacional inamovible.
En el nuevo aniversario, el presidente Mauricio Macri rindió homenaje a los soldados y aseguró que, aunque recordar a los fallecidos es triste, invita a la reflexión sobre los desafíos del país.
«El reclamo de soberanía es legítimo e irrenunciable y nos une a los argentinos más allá de nuestras diferencias», aseguró.
El excombatiente Gabriel Sagastume se refirió a los cambios en la concepción popular sobre el conflicto.
«Al principio nos costaba despegar la historia de la guerra con la dictadura militar. Nos perjudicaba a los que no éramos militares de carrera. Esto ya está aclarado y hoy la gente diferencia lo que era la dictadura y a los que nos tocó ir como soldados», dijo.
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Sobre la posibilidad de recuperar la soberanía del territorio, manifestó que existe «una idea pacífica respecto a la forma de recuperar las islas. Hay gente que cree que se pueden recuperar de forma violenta, pero hay una mayoría de gente que cree que la guerra fue un fracaso».
«Está el convencimiento de que las islas nos corresponden, sin tener en cuenta el Gobierno que esté. El criterio es que hay que hacer algo inteligente y distinto a lo que se hizo antes para recuperarlas», agregó.
En los últimos años, el contacto entre los argentinos y el territorio en disputa se ha profundizado gracias a las visitas de familiares de soldados enterrados en el cementerio de Darwin, ubicado en las islas. Además, desde 2014 funciona en Buenos Aires el Museo Malvinas, un espacio que recuerda la historia de las Islas. Gustavo Álvarez Rodríguez, director del museo, también dialogó con Sputnik.
«La idea fue tener un lugar donde tratar el tema específico de Malvinas, más allá del conflicto. El objetivo era la reivindicación de los cimientos de la soberanía nacional. Ratificamos la soberanía sobre las islas y sobre los espacios marítimos e insulares como parte del territorio nacional», dijo.
«Este es un museo vivo como también lo es el reclamo. Manejamos todo en contacto con los sobrevivientes. Mantenemos los preceptos básicos, más allá de novedades tecnológicas que surjan, trabajos de antropología forense y nuevos documentos», destacó.
Consultado sobre el interés que suscita tanto el museo como la historia de las islas para visitantes extranjeros, Rodríguez respondió que «muchos argentinos no conocen demasiado».
«Si preguntas sobre el conflicto a chicos de cuarto o quinto grado verás que las respuestas son disímiles. Esto lo comprobamos a través de las encuestas que realizamos a los chicos que recorren el museo. Debería estar más incorporado al sistema educativo», finalizó. (Sputnik)