MADRID.- El único debate televisado entre los principales líderes políticos españoles excluirá al partido ultraderechista Vox, según anunció este martes la entidad organizadora, tras una decisión de la Junta Electoral Central (JEC).
La compañía Atresmedia, matriz del canal privado de televisión Antena 3, hizo este anuncio poco después de que la JEC decidiera suspender el debate entre los líderes de los cinco principales partidos a nivel nacional debido a que se había invitado a Vox, que ahora mismo carece de representación en el Parlamento nacional.
La compañía Atresmedia acordó finalmente modificar el formato del debate, previsto para el próximo martes 23 de cara a las elecciones legislativas españolas del domingo 28 de abril.
La JEC basó su decisión en cómo estaba planteado el evento, pues consideraba que no se respetaba el pluralismo político ni cumplía el principio de «proporcionalidad», por lo que pidió a Atresmedia una alternativa.
Esa decisión llegó después de que tres partidos nacionalistas o regionales (el catalán JxCat, el vasco PNV y Coalición Canaria) presentaran diferentes recursos contra el formato de ese debate.
La Junta Electoral basó su decisión en un artículo de la Ley Electoral que define el pluralismo político durante los períodos de elecciones, algo que deben respetar tanto los medios de titularidad pública como privada.
Los recursos se basaban en que, junto a los cuatro grandes partidos parlamentarios a nivel nacional (PSOE, socialista; Partido Popular, conservador; Ciudadanos, liberal y Unidas Podemos, izquierda), se invitó a Vox.
El líder de Vox, Santiago Abascal, criticó esa decisión y señaló en Twitter: «Algunos no sabe qué hacer para excluir a Vox».
Esta partido no tiene actualmente representación en el Parlamento pero las encuestas de intención de voto coinciden en atribuirle un importante ascenso que le permitiría lograr varias decenas de legisladores en el Congreso que se elegirá en doce días.
La decisión del presidente del gobierno, el socialista Pedro Sánchez, de asistir a ese debate pero no a uno entre los cuatro grandes partidos en la radiotelevisión estatal (RTVE) causó controversia.
El gobierno explicó esa decisión en que Sánchez quería debatir con Vox y esa era la única forma posible de hacerlo, ya que RTVE se ceñía a las estipulaciones de la JEC contra la presencia de formaciones sin representación en el Parlamento.
Se trató de una decisión controvertida por cuanto dejaba a RTVE sin debate. La cadena pública había propuesto uno entre los candidatos de PP, PSOE, Unidas Podemos y Ciudadanos, pero no de Vox.
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